La LOMLOE, la nueva ley de educación con la que la ministra Isabel Celaá quiere derogar la Lomce del PP, se tramita con rapidez en el Congreso, hasta el punto de que el Gobierno aspira a que la Cámara Baja apruebe antes de final de año el texto que debería luego ser ratificado por el Senado.

La educación concertada ya ha manifestado que está en contra de esta reforma educativa, pues considera que termina con la capacidad de elección de los padres, por lo que está dando la batalla en la calle y en las redes sociales para que se frene el texto legal.

Miguel Ángel Fraile, director del Colegio Los Agustinos, en la Sierra de Madrid, ha dicho que se trata de una ley "ideológica que quiere hacer una escuela única para todos". Y es que, la reforma de la ministra Celaá "repercute a la hora de elegir el centro. Si es la administración la que va a asignar a las familias el lugar al que tienen que ir sus hijos a clase", se cercena la libertad de las familias a educarlos en colegios que respeten su escala de valores y convicciones.

El director ha explicado que la escuela concertada sería "subsidiaria" de la pública, pues solo si en ella no hubiera plazas suficientes entrarían en juego los centros concertados.

"Los centros concertados se han sostenido porque hay demanda", pero si no se puede elegir desaparece la libertad, ha subrayado. El experto ha dicho que cuando hay "competencia" mejoramos todos ya que cuanta "más variedad hay en una sociedad, más riqueza para todos". Por eso, ha lamentado que "no se pueda llegar a un consenso" político en materia de Educación.

Por lo pronto, la Plataforma Más Plurales, que aglutina a asociaciones de padres y madres de alumnos, sindicatos, empresas y diferentes colectivos del sector de la educación concertada, ha vuelto a concentrarse este viernes frente a las puertas del Congreso de los Diputados para mostrar su rechazo a la LOMLOE, la reforma de la ley educativa conocida como 'ley Celaá'.