Belén Rueda ha repasado en 'Herrera en COPE' su carrera y el rodaje de la última película en la que participa, El Pacto del joven director cinematográfico David Victori. La actriz española ha reconocido que aceptar un proyecto como ha hecho ella sin conocer el guion previamente tiene sus riesgos porque "el guion es la parte más importante antes de empezar porque con un buen guion puedes hacer una buena película, pero con un mal guion no puedes hacer una buena película". Pero ha admitido que David Victori "venía de la mano de unos productores con los que había trabajado anteriormente" y eso le daba confianza.

Belén ha querido aclarar que el actor no solo necesita talento y que detrás esa capacidad innata hay mucho trabajo: "Parece que cuando dices talento quitas todo lo que hay detrás y realmente yo he tenido la suerte de seguir trabajando y eso es lo que te va sumando como actriz, te va dando experiencias, te va dando una visión diferente de los proyectos que te llegan". 

Para Belén Rueda El Pacto "tiene algo especial" y "plantea una situación en la que mides que serías capaz de hacer por salvar a alguien a quien quieres". Sobre la participación en la película de su hija Mireia en la película ha reconocido que el papel de Clara era muy ajustado a su persona: "La imagen tenía que ser de una niña con mucha personalidad, pero con un aspecto muy frágil y un mundo interior muy grande y Mireia lo daba". Aunque, ha admitido que se ha reído mucho con ella: "También intentamos que en los momentos que no hay tanta tensión de alguna manera pasarlo bien".

Por último, Belén ha repasado alguna anécdota de su carrera como cuando le toca rodar escenas de verano en lugares donde hace mucho frío: "A cuatro grados bajo cero he ido descalza, con un camisón, lloviendo. Lo único que no tienes que mostrar es el frío, pero lo tienes".