"Mucho chiringuito, mucha campaña contra la masculinidad tóxica, pero a la hora de la verdad y a la hora de proteger a las mujeres, chapuzas y desidia"

El director de 'Herrera en COPE', además de los fallos en las pulseras antimaltrato, también analiza la reunión entre el canciller alemán y Pedro Sánchez

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Señoras, señores, me alegro. Buenos días. Les saludamos esta mañana de viernes desde la la Universidad Politécnica de Valencia con la Generalitat Valenciana. Todo el equipo ahí. Ahora mismo escucharemos a Jorge, a Requeijo, a Nicolás, a Paloma, a Alberto, a todos los que hacemos este programa que le trae la actualidad del día.

Por cierto, qué manera de empezar una mañana sabiendo que Greta Thunberg abandona el comité de dirección de la flotilla de Gaza. Cielo santo, se habrá enfadado con Ada Colau, se habrá hartado del crucero que se están pegando por los puertos del Mediterráneo. Ella que siempre lleva esa cara de cabreo, de neurótica o de histérica, que es lo que es. La verdad es que no encaja con los Boat Bans que se han embarcado con ella en esta operación de propaganda.

Y miren, hoy yo creo que deberíamos comenzar una sección que sirva para desmentir los titulares de El País. Hoy esta mañana el diario está muy preocupado por la cancelación, de censura. ¿Por qué? Porque han fulminado el programa de un conocido humorista que se mofó del atentado de Charlie Kirk. Lo que dijo es: "Yo creo que han sido los propios republicanos los que lo han matado para poder hacer de eso luego una...". Le han quitado el programa a este individuo y es que es curioso cuando durante años fue la ideología que ellos defienden la que hizo de la cancelación casi casi una religión. Reflexiones de la mañana.

Bueno, Pedro Sánchez, vamos a ver. Él y este gobierno han vuelto a estrellarse contra las mujeres. Ahora, a propósito de las famosas pulseras para maltratadores. Yo esto le resumo el episodio.

Este sistema se empezó a implantar en 2009, quiero recordar, y es una medida de protección efectiva. Pone la pulsera al tipo que es una amenaza para una mujer y se sabe dónde está, se alerta si se acerca a ella. Bueno, en fin.

En 2022 se renovó el contrato que hasta entonces prestaba Telefónica y se le adjudicó a otra compañía, y ahí empezaron los problemas. Uno de los primeros problemas era la portabilidad de los datos. Los registros en el sistema anterior no se transferían satisfactoriamente al nuevo sistema. Esos fallos en la continuidad de los sistemas, los fallos del propio funcionamiento de los aparatos, han propiciado algunos sobreseimientos de causas judiciales por maltrato.

Además, el sistema es defectuoso y en algunos casos genera multitud de avisos falsos, con lo que algunas víctimas se ponen de los nervios. O sea, pónganse ustedes en la situación de una que esté recibiendo avisos de que su maltratador la ronda a poca distancia y díganme si no es un sinvivir.

Por si todo esto no fuera suficiente, todos estos fallos se conocían desde hace meses y nadie hizo nada. Como siempre en este gobierno, la desidia más absoluta. Esta señora que grita tanto, ¿se acuerdan? Esta, la ministra de Igualdad. Esta que no llega ni sirve para concejal en Valladolid, que es lo que era, pegando aquellas voces en el Congreso. Yo creo que debería más o menos utilizar el mismo tono para lamentar todo esto. Escuchémosla de todas maneras.

Después de haber sido la fiscalía la que destapó el asunto al denunciar en su memoria anual la potencial desprotección de las víctimas, la gran cantidad de sobreseimientos y absoluciones, ayer Álvaro García Ortiz, volvió a dar otra batalla para decir “Diego donde había dicho digo". Ayer se enmendó a sí mismo. Según la nota, las víctimas no estuvieron protegidas en todo momento.

O sea, otra chapuza vinculada a este ministerio de propaganda que es el Ministerio de Igualdad. El contrato lo puso en marcha Irene Montero, conocida tarada de la banda de la tarta. Pero la ministra encargada hoy de velar por la calidad del servicio es la que daba los gritos, la del anuncio de los huevos. Mucho chiringuito, mucha campaña contra la masculinidad tóxica, pero a la hora de la verdad, a la hora de proteger a las mujeres, chapuzas y desidia. Esto comenzó con la Ley del sí es sí, ¿se acuerdan, no? La colección de rebajas de penas a violadores.

Y ayer, reunión entre Merz, el canciller alemán, y Pedro Sánchez. Fue tarde, a las 9 de la noche. Pidió disculpas por eso Sánchez.

Friedrich Merz es como la némesis, o sea, todo lo contrario de Sánchez en las instituciones europeas. Sánchez es infiable, traidor, mentiroso, embustero; Merz es todo lo contrario.

Fíjense si es fulero [Sánchez] que después de toda la chulería que se ha gastado estos días en España hablando del genocidio en Gaza, anoche delante del alemán se cuidó mucho de hablar de genocidio. Anoche dijo "ataque indiscriminado". Merz, por supuesto, se negó a utilizar el término genocidio para hablar de lo de Gaza. El alemán recordó que ya hace tiempo su país ha dejado de vender armamento a Israel, susceptible de ser utilizado en la ocupación de Gaza.

Sánchez tampoco ha conseguido que el alemán haya cambiado su negativa a apoyar el uso del catalán en las instituciones europeas. Eso que Álvarez ha llevado siete veces a Europa y las siete se lo han tumbado. Merz dijo ayer que si lo vuelven a llevar habrá otro revolcón, porque Alemania dejó muy claro que no va a cambiar de opinión en este asunto.

Ni Sánchez ha seducido a Merz, ni parece que Rodríguez Zapatero haya conseguido seducir a Puigdemont en su encuentro de ayer. Las informaciones apuntan a que Junts ha adelantado que votará en contra del techo de gasto de los presupuestos que lleguen a presentarse, y de las leyes de Bolaños, la ley Begoña para controlar la justicia. Incluso parece que están dispuestos a jubilar al famoso mediador internacional, Francisco Galindo, el salvadoreño, que ha resultado un bluf como tantas otras cosas.

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