Este martes en 'Herrera en COPE' hemos hecho una lista de los coches más icónicos que han recorrido las calles de España con la ayuda de los 'fósforos'. Entre todas las llamadas ha destacado la de Alejandro Morán, un joyero con despacho abierto en la calle Teatro de León, y más conocido por los suyos como Jandrín.

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Según ha dicho, empezó a conducir con 15 años y medio, pero "sin carnet", el clásico Seat 600, el coche que cambió el país entero, pues su incorporación a las carreteras a finales de los años 50 marcó el desarrollo de la España de la dictadura y la motorización definitiva del país.

Más tarde tuvo un Renault 8, cuya concepción también arrancó a finales de la década de los 50, y cuya demanda fue muy alta a lo largo de sus doce años de vida en España. "El 1 de febrero de 1981 se me salió una rueda en marcha bajando por el Puerto de San Isidro y después ya esperé a los 18 para tener permiso y cogí los R12 de mi abuelo y de mi padre", ha comentado el oyente.

Con el coche con el que soñaban todos "los chavales" de su generación era con el Renault 5 Copa de 160 caballos, "un pepino". Sus prestaciones llamaron la atención de los aficionados al motor y también de las competiciones. Se trató de un coche que nació para plantar cara a una nueva categoría de automóviles y que acabó creando prácticamente una propia. Desde luego, por prestaciones y eficacia logró estar en lo más alto, algo que queda patente con los buenos resultados que sigue obteniendo en algunas competiciones hoy en día frente a rivales mucho más modernos.

A pesar de las graves consecuencias que ha tenido la pandemia en el mercado automovilístico, el sector sigue adelante y espera dar un vuelco el 2021 con las nuevas propuestas de las marcas, con una marcada tendencia por la electromovilidad. Por ejemplo, este año se renueva la gama de Fiat Panda, uno de los modelos más icónicos de la marca italiana, que celebra sus 40 años, y también llega la undécima generación del Honda Cívic.