Mario, el conductor de VTC donde iba la hija del piloto Carlos Sainz, ha llamado este lunes al programa de Carlos Herrera para relatar cómo fue la agresión que sufrieron por parte de un grupo de taxistas. El altercado se produjo este domingo mientras la llevaba en un coche de la compañía Uber en Madrid.

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Según ha relatado, les tiraron una piedra de grandes dimensiones que produjo un impacto “espectacular” en el coche, llegando a romper los cristales. Eran las 12.40 de la mañana cuando, a la altura de la calle Princesa, a 10 o 15 metros de la parada de taxi de Moncloa, un grupo de taxistas les agredió. “Yo me detuve al principio del susto. Después, a 10 o 15 metros, paré para ver si la chica estaba bien”, ha relatado.

 

Indignado con la agresión que sufrió ayer mi hermana en un uber por Madrid. Un taxista les tiro una piedra. Se podrian haber hecho mucho daño o algo peor. Sé que la mayoria del gremio no apoya este tipo de agresiones pero pongan fin a esta situación. pic.twitter.com/SUKrLpXVLw

— Carlos Sainz (@Carlossainz55) 20 de enero de 2019

Mario ha explicado que la agresión “está denunciada” y que desconoce si las autoridades ya han identificado a los violentos. Ha aprovechado para decir que los conductores de VTC sufren agresiones “a diario” por parte de los taxistas, que “siempre van en grupo de 3,4 o 5 personas”. Entre los malos tratos recibidos destacan los “insultos, patadas, nos tiran huevos, piedras, etc”. Según ha manifestado, si alguna vez un conductor de VTC pierde la paciencia es por el acoso al que están sometidos, aunque esto ocurre las menos de las veces.

El conductor ha negado algunas de las acusaciones de los taxistas. Según ha relatado, tienen prohibido recoger a clientes por la calle a mano alzada, como sostienen los taxistas. Además, ha explicado que “si el cliente hace un pedido, tenemos la obligación de ir a recogerlo y si no está, de esperarlo 5 minutos”, pero siempre operando a través de la app.