La empresa se llama 'Limpiezas Traumáticas' y su misión es borrar un rastro mortal. Fue fundada en Málaga hace dos años por los hermanos Núñez: Antonio, Adrián e Iván.

Ellos se encargan de sanear los escenarios donde ha ocurrido un asesinato, un suicidio, un accidente, un caso de síndrome de Diógenes o una muerte desatendida, aquellas que se producen en soledad.

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Llevan monos de protección química, máscaras de respiración con filtros y cubrebotas para evitar contagios y que los productos que emplean no acaben envenenándoles.

Suelen tener una media de dos o tres actuaciones al mes y su clientela se reparte a partes iguales entre la administración pública y los particulares.

Uno de los escenarios más duros que tuvieron que limpiar fue el de un asesinato machista que se perpetró con una escopeta.

“La pared estaba teñida de rojo. Era brutal”, ha contado a 'El Mund'o, Antonio, uno de los hermanos Núñez. Tuvieron que picar la piedra porque la sangre se había filtrado.

En un caso de muerte desatendida, los fluidos se extendieron por la tarima, lo que les obligó a levantar el suelo, desinfectar y cambiar los listones.

Málaga, donde el pasado año se cometieron 25 crímenes, ya cuenta con su señor Lobo, el personaje de la película Pulp Fiction que, vestido de negro, se presentaba en el lugar del crimen y decía: “Soy el Señor Lobo, soluciono problemas.”

Es la ‘Historia del día’ en ‘Herrera en COPE’.