El fútbol a veces tiene razones que la razón no entiende. Como que el Clásico en el que Barcelona y Real Madrid se juegan buena parte de su opciones en LaLiga en este final de temporada sea el de Ousmane Dembélé y Vinicius Júnior. O que la alineación del Barça para este sábado sea casi un 'Dembélé y diez más', o que al madridismo haya pasado de vivir pendiente de la salud de Eden Hazard a rezar para que Vinicius no se constipe antes del enésimo duelo con el eterno rival.