La sincera opinión de Luis de la Fuente sobre las banderas independentistas e ir con España: "Quiero gente con sentimiento de pertenencia"
La polémica en torno a la presencia de Íñigo Martínez en la Selección queda resuelta por el seleccionador en El Partidazo de COPE

Juanma Castaño cuestiona a Luis de la Fuente sobre los jugadores con sentimiento independentista y la posibilidad de que vayan con la Selección
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El debate sobre la presencia de Íñigo Martínez en la Selección Española ha vuelto a ocupar espacio mediático tras las declaraciones del seleccionador nacional, Luis de la Fuente, en El Partidazo de COPE. La polémica estalló meses atrás cuando el central del FC Barcelona lució una estelada durante la rúa de celebración por el título de Liga, lo que generó un aluvión de críticas sobre su posible continuidad con ‘La Roja’. De la Fuente, sin embargo, ha querido zanjar el asunto con un mensaje claro: lo único que le importa es lo deportivo.
"No soy sospechoso. Mi única motivación es deportiva"
En conversación con Juanma Castaño, el seleccionador fue cuestionado directamente sobre si la imagen de un jugador ondeando una bandera independentista debería condicionar su presencia en la selección. Su respuesta fue tajante: “La única motivación con todos los futbolistas es única y exclusivamente deportiva”. De la Fuente se mostró molesto ante la idea de que otros factores puedan influir en sus decisiones: “Yo no soy sospechoso. Habrá gente que tenga otros intereses. Yo, no. Porque el día que no elija a los mejores y pierda, me van a echar”.
Preguntado específicamente sobre la situación de Íñigo Martínez, De la Fuente admitió entender el trasfondo de la pregunta: “Creo saber por dónde vas. Y no entro en eso. Yo lo único que quiero es gente comprometida, que esté implicada, con sentido de pertenencia”. En otras palabras, no le interesa si un futbolista ha ondeado una estelada o no; lo que busca es compromiso real con el proyecto nacional.
La imagen de la estelada y el debate reavivado
La controversia surgió cuando Íñigo Martínez fue uno de los protagonistas de la celebración del Barça al conquistar la Liga. En las calles de Barcelona, ondeó la estelada y portó la ikurriña sobre los hombros, gestos que fueron interpretados como una expresión política y encendieron las redes sociales. Muchos aficionados pusieron en duda si un jugador que muestra públicamente símbolos independentistas debería representar a España.

Los jugadores del FC Barcelona durante la celebración este viernes de la consecución del triplete nacional (Supercopa de España, Copa del Rey y LaLiga)
Además, la situación se vio agravada cuando el jugador no acudió a la última convocatoria alegando lesión, pero jugó con el Barça pocos días después. Osasuna incluso elevó una queja a la FIFA por posible infracción del artículo 5, aunque el Comité de Disciplina desestimó la denuncia.
En medio del ruido, Luis de la Fuente ya defendió a su jugador públicamente en su momento. “No hay asunto”, dijo en declaraciones a Movistar+. “Es un futbolista que puede venir a la Selección cuando se le convoque y cuando él quiera. No tengo ningún problema. Únicamente no vino por una lesión y ya está”. Con esas palabras, el seleccionador quitó hierro al asunto y desautorizó cualquier lectura política sobre la ausencia de Íñigo.
Dentro del vestuario de la campeona de Europa, algunos compañeros como Unai Simón o Pedri también mostraron su apoyo al defensa vasco. "Me parece una falta de respeto que se cuestione su compromiso", llegó a declarar el portero internacional.
Compromiso por encima de símbolos
La posición de De la Fuente es clara: las decisiones se toman por méritos deportivos, no ideológicos. “Yo si el futbolista está implicado, quiere venir, tiene compromiso y juega bien...”, afirmó en la COPE. “Y yo no he conocido a nadie que no lo esté”.
En un momento de alta sensibilidad política, el seleccionador apuesta por el pragmatismo y el respeto. No le interesa la simbología de los jugadores, sino su actitud y rendimiento. Un enfoque que, aunque pueda incomodar a algunos sectores, es coherente con su discurso: “Yo no me cuestiono nunca eso ni lo cuestionaré”.