"Los jóvenes la fe y el discernimiento vocacional" es el lema de esta cita eclesial que reflexionará en torno a la realidad que viven los jóvenes y definirá estrategias concretas de pastoral juvenil.

En El Espejo, el cardenal Carlos Osoro, uno de los obispos que participa en este sínodo, calificó de "muy emocionante" la ceremonia de apertura, en la que por primera vez han participado dos obispos chinos: "Cuando uno ve cómo la Iglesia es capaz de vivir la comunión y la unidad en la misión expresada en la celebración como la Eucaristía de la inauguraciónes ... es algo que llega al corazón de verdad".

En sus primeras intervenciones el Papa ha pedido a los jóvenes confianza en la Iglesia que a pesar de las debilidades de sus miembros y de las dificultades históricas es madre y familia. A los padres sinodales también les ha pedido confianza en los jóvenes, en la iglesia y en el futuro: "La confianza es una palabra fundamental porque te lleva a escuchar y a concocer la realidad de los jóvenes"

El cardenal Carlos Osoro se ha referido a los "Parlamentos de comunión", una experiencia que ha impulsado en la Archidiócesis de Madrid y que ha servido para conocer mejor cómo se sienten los jóvenes y cuáles son sus principales preocupaciones. " Sin darnos cuenta -ha dicho- también nosotros generamos descarte y generamos indiferencia y explución de los jóvenes".

Por eso ha explicado que crear espacios de escucha "constituye una fuerza enorme para la afirmación de su identidad personal".

Junto a los padres sinodales, nombrados por las conferencias episcopales y los que forman parte de la Secretaría General del Sínodo, como es el caso del cardenal Carlos Osoro, que ha sido asignado directamente por el Papa Francisco, en las sesiones participan 36 jóvenes auditores llegados de distintos lugares del mundo y que a lo largo del mes irán contando sus experiencias en sus comunidades y parroquias de origen.

En contra de los que afirman que la Iglesia debería hacerse más amable y rebajar la exigencia a la hora de proponer a los jóvenes el Evangelio de Jesucristo el invitado de El Espejo ha subrayado que no se trata de hacer rebajas, sino de abrir las puertas de la Iglesia para que los jóvenes descubran la belleza de lo que propone la Igleisia: "No hay que hacer rebajas,  las rebajas vienen cuando se quiere hacer entrar a la gente por otros caminos. Los jóvenes quieren de la Iglesia que sea profecía de fraternidad, una casa que sea familia, que sea mística y que sepa abrir a los jóvenes a la trascendencia".