El excomisario de la Policía Nacional José Villarejo comparece este miércoles ante el juez de la Audiencia Nacional Diego de Egea, que ha anunciado la posibilidad de revisar su situación de prisión provisional tras escuchar su declaración, según adelantó al negarse a excarcelarle el pasado 23 de mayo.

En ese auto, en el que ratificó la prisión provisional acordada el 5 de noviembre al rechazar un recurso del excomisario, el juez de la Audiencia Nacional precisó no obstante que esta decisión no impedía que "se pueda revisar en su momento" tras su declaración el 30 de mayo y a la luz de "los informes médicos obrantes en autos y de los que se están realizando".

Hace unas semanas, Villarejo, que se encuentra en la cárcel de Estremera (Madrid), tuvo que ser hospitalizado de urgencia por la reacción a un medicamento y fue dado de alta al día siguiente.

Para mantenerle en prisión, De Egea invocó en su resolución "la naturaleza de los presuntos delitos cometidos (organización criminal, blanqueo de dinero y cohecho), las penas que pudieran corresponderle, las circunstancias del hecho" y también "garantizar la eficacia de la investigación procesal y la disponibilidad del investigado a los llamamientos judiciales".

Villarejo y el abogado Rafael Redondo son los dos únicos investigados en esta causa que permanecen en prisión después de que el pasado 6 de marzo quedará en libertad el excomisario de Barajas Carlos Salamanca, que ingresó también en prisión el 5 de noviembre.

Entre las prácticas que se le atribuyen a la supuesta red integrada por Villarejo y Salamanca está la de facilitar la entrada de personas de nacionalidad guineana en España y la posterior regularización de su situación a través de las empresas de Villarejo.

Según la Fiscalía Anticorrupción, ambos se valían de las funciones propias de sus respectivos cargos policiales, "especialmente sensibles para la seguridad nacional", para recibir "elevadas sumas de dinero y regalos suntuarios diversos".

Todo ello a cambio de sus servicios especializados "de inteligencia" y de "facilitar la entrada ilegal de ciudadanos no comunitarios en territorio español".

En esta causa, denominada Tándem, también figuran como investigados, entre otros, la mujer de Villarejo, Gema Isabel Alcalá, un hijo de ambos y otro de Salamanca.