Los cuerpos de los abuelos paternos, su tía y una hermana pequeña del dictador descansan en el cementerio municipal de Ferrol. La tumba pasaba hasta hace poco inadvertida, pero con la decisión del Gobierno de Pedro Sánchez de exhumar los restos del dictador del Valle de los Caídos, ha empezado a acaparar la atención de los grupos de izquierda en el Consistorio. 

El lunes el pleno municipal aprobaba una moción en la que se reclama la expropiación de la tumba para evitar un eventual traslado del dictador a su ciudad natal.  El Ayuntamiento de Ferrol requerirá a la familia el pago de las tasas del tumulto de los últimos cuatro años, el resto de recibos ya están prescritos. En el caso de que no abonasen la factura, la tumba pasará a manos municipales. 

La familia tendría que decidir qué hacer con sus allegados, en el caso de que "la familia tampoco quiere hacerse cargo de estos restos serán llevados a una fosa común" aseguró el alcalde Jorge Suárez. El Ayuntamiento cuenta con otra opción para expropiar la tumba regalada. El siguiente paso sería convocar otro pleno en agostro para revocar el acuerdo tomado en 1967. 

Con los votos a favor de Ferrol en Común, BNG y PSOE y la abstención del PP y Ciudadanos, el pleno mostró también su rechazo al traslado de los restos del dictador a la ciudad que no quieren que se convierta en un lugar de perigrinaje de simpatizantes del franquismo. Nada podrá impedir que los familiares compraran otra tumba para enterrarlo allí. La familia Franco no ha manifestado por el momento, su intención de trasladar el cuerpo a la ciudaad natal.