Una de esas historias tiene que ver con el paso de”La Oración en el Huerto”, perteneciente a la Cofradía de Nuestro Padre Jesús. Desde hace mucho tiempo se habla de que los dátiles que adornan la palmera de este paso tienen la capacidad de lograr que las mujeres que están buscando quedarse embarazadas puedan lograrlo. Según la leyenda, y como nos ha destacado Antonio Botías, esos dátiles deben ser “paseados” en la procesión, ya que no servirían los que no se han quedado en la iglesia.

Otra leyenda hace referencia a la figura de uno de los sayones que procesiona en la Cofradía del Cristo de la Sangre. Al parecer el escultor se fijó en un vecino del barrio de El Carmen, el cual tenía una discapacidad y le llamaban Aurelio. La familia, en su momento, monto en cólera y como nos ha dicho Botías, tuvieron que retirarlo del paso. Tras pasar 50 años, ya fallecido Aurelio, volvió a ser colocado para salir en procesión.

Finalmente, también existe una leyenda que rodea a la imagen del Ángel de la Pasión de Salzillo. Se dice, y lo atestigua el propio cronista de la ciudad, que el maestro imaginero acogió cerca de su taller a un mendigo al que dio pan y un poco de vino. Salzillo no se encontraba ese día inspirado para realizar la imagen y al levantarse al día siguiente descubrió sobre una mesa un boceto pintado de la talla. Todo apunta, según la leyenda, a qué salió de las manos de ese mendigo.