Este viernes ha arrancado en la Audiencia Provincial de Gipuzkoa el juicio por la muerte de Santi Coca, fallecido en 2019 en San Sebastián a la edad de 17 años, tras recibir una paliza por un grupo de jóvenes a la salida de una discoteca la madrugada del 26 de abril. Cinco jóvenes, que entonces tenían entre 18 y 22 años, están acusados de asesinato y se enfrentan a una pena de 20 años de cárcel. El juicio comienza con la ausencia de un sexto acusado, que se encuentra en paradero desconocido desde hace un año, razón por la que la vista se había aplazado hasta ahora desde marzo pasado.

El juicio ha arrancado este viernes con la elección de los nueve titulares y dos suplentes que conformarán el jurado popular y la presentación de las alegaciones previas de todas las partes y está previsto que sea el lunes cuando comience la declaración de los testigos, entre ellas, la de uno de los hermanos de Santi Coca. La declaración de su madre, Fátima Hacine, se producirá el martes, día en el que la víctima hubiera cumplido 22 años. Por su parte, los 5 encausados declararán en último lugar aunque estarán presentes a lo largo de todo el juicio.

El abogado de la familia de Santi Coca, Eduardo Ruiz de Erenchun, ha subrayado este viernes que la familia "está con muchas ganas de que comience el juicio para pasar página, porque ya son más de 4 años" y ha mostrado su confianza absoluta en el "sentido común" del jurado para obtener una sentencia condenatoria.

Ruiz de Erenchun ha subrayado que la familia espera "comprensión, empatía, que se analicen las pruebas con rigor y con sentido común" en un juicio que va a ser largo y que se prolongará hasta el 4 o 5 de diciembre. Además de la Fiscalía y de los abogados defensores, la familia de Santi Coca está personada como acusación particular y el Ayuntamiento de San Sebastián ejerce la acción popular.

Los hechos que se enjuician tuvieron lugar el 26 de abril de 2019 en el exterior de la discoteca Gu de San Sebastián donde el acusado recibió una paliza por parte de un grupo de jóvenes que iniciaron una disputa a raiz de un paquete de tabaco que solicitaron al grupo de amigos de Santi Coca. El joven fue trasladado en estado muy grave al Hospital San Sebastián donde falleció dos días después, el 28 de abril, a consecuencia de la gravedad de sus lesiones, tras permanecer dos días en coma.