Este agravio comparativo entre los ciudadanos que viven en Comunidades con caldera central y ciudadanos con caldera individual se justifica en que los primeros no pueden acogerse al mercado regulado, por lo que pagan más del doble, respecto a las calderas individuales.

La tarifa TUR es la que permite que el consumo anual de gas computado por vivienda sea inferior al consumo máximo establecido en las tarifas de último recurso y que, por tanto, posibilita que se compute el consumo por vivienda y no el consumo global de la Comunidad.

En Pamplona, los administradores de fincas se han dado cuenta de esta diferencia, por lo que están recogiendo firmas para que se revisen las normas y se compute el consumo por vivienda y no el consumo global en las comunidades.