El futuro de los Mercados de Logroño: El Corregidor sube la persiana de nuevos puestos en su 65 aniversario
El Mercado del Corregidor de Logroño sumará dos o tres puestos nuevos antes de que acabe ese año 2025. Una veintena de comerciantes suben cada día la persiana de negocios que resisten estoicamente los desafíos del paso del tiempo

Carnicería Rituerto
Logroño - Publicado el - Actualizado
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Patricia, Murrieta, Múgica,Corregidor, Milicias y San Blas. Son los seis mercados tradicionales de Logroño. Mercados que permanecen con nostalgia en el recuerdo de los logroñeses, merados donde se vendía y compraba pero donde también se celebraba buena parte de la vida diaria en la capital riojana. Era un lugar de encuentro, donde comerciantes y clientes eran casi familia, establecimientos donde conocían a cada uno de sus clientes y se preocupan por su ausencia.
Hace algo más de medio siglo daban cobijo a unos 300 comerciantes. Desde estos negocios era de donde salía el producto fresco riojano y llegaba cada día a los hogares de los logroñeses. Lechugas de la huerta de Varea o ternera de los Cameros. Sin prácticamente intermediarios.
La época de mayor esplendor fue decayendo con el paso de los años, comenzó entonces un goteo incesante de bajas. Ya nada es lo que era, mira como ejemplo, el Mercado de Murrieta es hoy un gimnasio.
La realidad es que en la actualidad solo se mantienen abiertos al público cuatro de los seis mercados: Milicias, Múgica, Corregidor y la Plaza de Abastos. Pero para ser realistas, tan solo dos pueden considerarse Mercados, la Plaza de Abastos y el Corregidor. En los otros dos, sobreviven uno o dos comercios que esperan jubilaciones inminentes.
Subsisten algo más de medio centenar de negocios de este tipo en los mercados de Logroño.
el corregidor, un aniversario con buenas noticias
Enrique Rituerto, carnicero, es además el presidente de la Asociación de Comerciantes El Corregidor. Relata en COPE Rioja que en los últimos años se han producido un par de aperturas y que antes de que acabe el año "podrían subir la persiana nuevos puestos en el Corregidor por lo que parece que el trabajo que estamos haciendo en los últimos años está dando sus frutos".
Son varios los factores que han provocado el paulatino desmantelamiento de los mercados de Logroño. Fundamentalmente, la competencia de las grandes superficies que con los años se han ido creando en su entorno, pero también la falta de relevo generacional.
La jubilación es el principal motivo que ha llevado al cierre de la mayor parte de los negocios. Otros comerciantes optaron en su día por trasladarse al exterior. "Es difícil el relevo generacional porque estos negocios son muy esclavos y si no se ve una clara rentabilidad es difícil que los hijos quieran continuar con la pelea que han tenido sus padres".
También han hecho mella cambios de hábitos de consumo. Los barrios envejecen y los clientes se van reduciendo. Además, si llega gente joven, ésta tiene diferentes hábitos de compra. Hay menos tiempo o, mejor dicho, quizá dedicamos menos tiempo a hacer la compra. Parece que nos cuidamos mucho pero luego no priorizamos la compra más directa, los productos más frescos.
Pero no todo está perdido, hay esperanza. Es cierto que se están poniendo en marcha iniciativas para adaptarse a los tiempos. En el Mercado del Corregidor ha tomado medidas concretas desde hace unos años. La pandemia del COVID les puso contra las cuerdas y los comerciantes supieron reaccionar.
Pedidos por WhassApp o página web, agruparse para entregas a domicilio, llegando incluso a hacer entregas en localidades de Návarra o del área metropolitana... Incluso este mercado cuenta con taquillas refrigeradas, un servicio que permite tener el mercado abierto las 24 horas los siete días de la semana...
Este año el Mercado El Corregidor está de celebración. Es momento de recordar su historia que es la historia de Logroño. El 1 de marzo del año 1960, la capital riojana se arriesgó a abrir un nuevo comercio en pleno centro. Unas semanas más tarde aquellos comerciantes empezaron a descargar sus productos y a llenar sus negocios. Hoy esta galería comercial cuenta con una veintena de comerciantes. Entre ellos se encuentran fruterías, pescaderías, panadería, conservas, una tienda de pastas o una cafetería. El objetivo es llegar a 24 antes de que acabe este 2025.