Aunque se había especulado en las últimas semanas con la posibilidad de que la Consellería de Sanidade levantase parcialmente las restricciones en el municipio de Lugo, impuestas en su día para cortar la cadena de contagios de Covid-19, finalmente ha decidido mantener el nivel de alerta y, consecuentemente, todas las medidas adoptadas para evitar la propagación del coronavirrus.
Por lo tanto, seguirán las restricciones de aforo al 50% en comercios, autoescuelas, academias, bibliotecas y hostelería.
No se puede consumir en la barra de los bares y está prohibida la celebración de verbenas y otras celebraciones populares. También hay limitación de aforo para bodas, bautizos, entierros y velatorios.
Además, las residencias de la tercera edad quedan cerradas a las visitas.
En la práctica, las restricciones incluso se endurecen, dado que la Xunta de Galicia, después de escuchar al comité clínico, ha limitado a solo diez personas las reuniones en toda la Comunidad Autónoma.