Medio centenar de personas se han concentrado en la mañana de este miércoles, 12 de mayo, Día Internacional de la enfermedad de sensibilidad química múltiple (SQM), ante el Hospital Arquitecto Marcide de Ferrol, para demandar al Sergas el cumplimiento del protocolo que tiene activo para tratar a los pacientes afectados por esta dolencia.

La convocatoria ha corrido a cargo de la entidad SQM España y ha contado con el apoyo de la Plataforma social gallega.

Una de sus portavoces, María Ángeles Soto, ha detallado que “hoy

se celebra el Día Internacional de cuatro enfermedades consideradas invisibles por el desconocimiento del propio sistema sanitario y de la población general”, como son la sensibilidad química múltiple, la encefalomielitis miálgica o síndrome de fatiga crónica, la Fibromialgia y la electrohipersensibilidad. “Todas ellas son enfermedades emergentes y muy incapacitantes cuya frecuencia no cesa de aumentar en todo el mundo”, ha detallado esta ferrolana afectada de SQM.

Es por ello que ha reclamado “la creación de unidades especializadas que puedan realizar el diagnóstico y seguimiento de nuestras enfermedades y la aplicación de protocolos específicos en los centros sanitarios, que garanticen nuestra asistencia sin riesgo de agravamiento cuando pedimos atención médica”.

BAREMOS

María Ángeles Soto también ha asegurado que “es fundamental que estas enfermedades sean incluidas en los baremos utilizados en incapacidad, discapacidad y dependencia para que podamos obtener las prestaciones sociales y sanitarias que se le dan al resto de enfermos y que a nosotros se nos niegan, en una clara situación discriminatoria”.

Así, ha reseñado que muchos de estos enfermos sufren “exclusión social porque no puedan trabajar, pero se les niega la incapacidad, motivando el que no tengan ingresos económicos, pero se les niegan las prestaciones sociales”.

Al mismo tiempo también reclaman “nuestro derecho a ser tratados en igualdad de condiciones que los afectados por otras patologías, a que se reconozca nuestro derecho a la protección de la salud contemplado en el artículo 43 de nuestra Constitución y que a nosotros se nos niega”.

Por último, ha incidido en que “somos personas, no números ni objetos y la obligación de los poderes públicos, es poner los medios necesarios para evitar la discriminación que sufrimos cada día”, ha sentenciado.