El entrenador del CD Badajoz Mehdi Nafti dirige la orqueta del Nuevo Vivero. En varias ocasiones durante la tarde de ayer se dirigió al público que abarrotaba la tribuna para pedir ánimo para sus jugadores. Nafti también dirige a sus jugadores con la misma vehemencia. Cuando Adama Fofana, al que muchos ya llaman de manera cariñosa desde la grada "Bifana", se iba a retirar del terreno de juego, Nafit le señaló insistentemente que se fuera para el potro lado del campo, pera ganar algo de tiempo. Son dos muestras que dejan entrever lo que pasa por su rasurada cabeza: ganar, sumar puntos, subir posiciones en la tabla...

Decía Nafti en la rueda de prensa posterior al partido: "no quiero que mis chicos se pongan límites y a ver hasta dónde podemos llegar". El técnico blanquinegro tampoco quiere ponerse límites: "El equipo puede competir contra los mejores pero siempre hay un pero". Para Nafti el respeto a los rivales es fundamental, y esa es la mejor manera para comenzar el camino del triunfo: "Hemos ganado a equipos fuertes aquí pero siempre recuerdo Almería B, Málaga B, Talavera... no vamos a ir de cracks a por los playoffs porque hace cuatro meses éramos unos mindundis".

El hispano tunecino cree que el encuentro ante el Cartagena "fueron dos partidos distintos muy marcados entre el primer tiempo y el segundo. La primera media hora fue un querer y no poder. A partir de eso jugamos más en campo contrario y el segundo tiempo fuimos superiores al rival". 

El Badajoz es sexto con 51 puntos. a tan solo dos del quinto, San Fernando, y a 5 de la cuarta, plaza de playoff, que ocupa el UCAM, precisamente el próximo rival del conjunto pacense.