La Comunidad de Labradores ha denunciado la proliferación de robos en el campo y exige a las administraciones más medios humanos para patrullar las fincas. Los ladrones sustraen por medio de butrones en las naves y casetas agrícolas todo tipo de material de valor para su utilización o venta en el mercado negro. Cada vez actúan más cerca de los núcleos urbanos “con total impunidad ante la falta de guardas rurales y efectivos de la Guardia Civil”.

Uno de los afectados, Antonio Ortiz, en declaraciones a COPE, dice que este año ya le han robado varias veces: “El 8 de marzo, me robaron y hace unos días se llevaron 900 postes de embarrar -unos 3.000 kilos de hierro-, gasoil, baterías…; todo valorado en unos 5.000 euros”.

Antonio está convencido de que estos robos se pueden evitar, pero faltan medios: “Lo que no puede ser es que de Almendralejo te tengas que ir a Mérida a poner la denuncia, porque en el cuartel del Almendralejo solo se puede poner de 9 a 2. Viene una patrulla de Villalba a verte la caseta”; y añade que los delincuentes “ven donde están las patrullas”, y cuando actúan “no les da tiempo a llegar”. En los últimos días, “hay compañeros a los que les han robado en cuatro casetas; es muy fuerte”.