La propiedad ha subrayado en un comunicado que hay riesgos de desprendimiento en el solar, que ponen en peligro a las personas que lo están okupando y que acceden al recinto tras escalar un muro contruido para tratar de impedir su entrada.
Los dueños denunciaron los hechos hace dos meses y ahora piden el desalojo del terreno, que forma parte del conjunto urbanístico dónde está prevista la construcción del complejo hotelero de lujo. El solar esta ubicado en frente de las puertas de la Iglesia de los Santos Juanes y del Mercado Central.
Según los dueños, no es la primera vez que se okupan los solares de los Palacios de la calle Eixarchs, ya que al menos se ha producido en tres ocasiones con anterioridad, por lo que la familia propietaria levantó un muro de más de dos metros de altura con bloques de hormigón y eliminó la puerta con cerradura de seguridad para evitar el acceso al solar. Sin embargo, se han retirado varios bloques para rebajar la altura del muro y posibilitar una escalada sencilla.
"Quienes pasan la noche en ese solar corren peligro. En la zona hay un apeo que asegura la pared colindante, perteneciente al edificio del número tres de la calle Eixarchs. Se encuentra así porque los Palacios están apuntalados para proteger su estabilidad. Si bien no existe riesgo de derrumbe, puede haber algún desprendimiento aislado, debido a las vibraciones con motivo de las obras de la plaza Brujas", advierte Luis Cortés, arquitecto y miembro del equipo que ha presentado ya el proyecto de construcción definitivo del hotel al Ayuntamiento.
"Aunque escalar el muro no es muy complicado, puede producirse una caída o accidente de un ocupante ilegal. Cualquier percance puede comprometer la salud o la vida del accidentado y la responsabilidad de la propiedad. Y no queremos ni una cosa ni la otra", advierte Cortés. Además, alertan también de peligro de incendio, ya que en la zona se han registrado algunos que los vecinos sospechan que han sido intencionados.
Los propietarios del edificio denunciaron la okupación en la comisaría de la Policía Nacional el pasado 28 de abril y ahora insta a las autoridades a que intervengan para llevar a cabo el desalojo, ya que el solar sigue ocupado.
La promotora Lova Tres, propiedad de una familia valenciana, inició en 2001 el proceso de compra de los palacios de los siglos XVI y XVIII. "Desde entonces, han trabajado para sacar adelante un voluminoso expediente, siempre con el respaldo de los técnicos municipales. Han atendido a todas las solicitudes para cumplir la legalidad vigente y han firmado un convenio con el Ayuntamiento de València, que les reconoció en 2013 como agente urbanizador del PEPRI de Velluters", explican en el comunicado.
El proyecto prevé la restauración de los palacios "conservando los importantes elementos artísticos que contiene y añadiendo dos edificios de nueva planta en solares" también de Lova Tres, que tuvo que adquirirlos en la reparcelación de la Unidad de Ejecución para poder ejecutar las obras de urbanización del entorno, que "siguen sin poderse iniciar".
RETRASO "INJUSTIFICADO E INEXPLICABLE"
La propiedad recalca que, para eso, "será necesario que el Ayuntamiento de València conceda la licencia de actividad y de obra de una vez por todas, cuya solicitud se presentó hace cuatro años y está sufriendo un retraso injustificado e inexplicable".
Para los dueños, "su concesión acabaría de raíz con los problemas de ocupación ilegal, falta de salubridad y consumo de drogas que está viviendo el área donde se encuentran los palacios y los solares, que incluye las calles de Eixarchs, Valeriola, Beluga, Cardá y Botellas del barrio de Velluters de València".
