¿Por qué se cierran tantas playas este verano en la Comunidad Valenciana?
"Tenemos personal recogiendo muestras de lunes a viernes y si detectamos un posible vertido, se actúa de inmediato"

Una de los tramos de playa clausurado en Calp
Valencia - Publicado el
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Aunque la Comunitat Valenciana puede presumir de tener una de las costas con mayor número de banderas azules de Europa, este verano se han multiplicado los episodios de cierres puntuales de playas por contaminación fecal. Una situación que, aunque no es nueva, ha generado inquietud entre bañistas y residentes. ¿Qué está pasando en nuestras aguas?
"El cierre de playas ha ocurrido siempre, pero este año se están concentrando más al inicio de la temporada", explica Marisa Bueno, jefa de Control de Aguas de la Conselleria de Medio Ambiente. En una entrevista concedida a Mediodía COPE Más Valencia, Bueno detalla los motivos que han llevado a esta situación: temporales de mar, lluvias intensas, vertidos inesperados y la elevada temperatura del agua del mar, todos factores que incrementan las probabilidades de que se altere la calidad del agua.
Una de las principales causas de contaminación, según señala, no son los emisarios submarinos que trasladan los residuos lejos de la costa, sino los alivios de emergencia de las redes de saneamiento: "Cuando llueve mucho, las acequias, las golas o incluso las propias estaciones de bombeo no dan abasto, y se producen vertidos en línea de costa, justo donde nos bañamos". Y esa zona crítica son los primeros 500 metros desde la orilla.
Además, en algunas ocasiones, “se producen vertidos por parte de embarcaciones que limpian sus tanques o tiran residuos al mar sin control”, como ocurrió recientemente con una mancha blanca de materia grasa en la costa sur, posiblemente causada por un barco. “No había hidrocarburos, pero sí residuos orgánicos que no deberían estar ahí”, matiza.
La buena noticia es que, gracias al control y la vigilancia, los cierres suelen ser breves y preventivos. "El mar es muy agradecido. Los parámetros de contaminación, como la Escherichia coli o los enterococos intestinales, sobreviven poco tiempo en el medio salado. En apenas 24-48 horas desaparecen", afirma Bueno.
La Conselleria realiza un seguimiento semanal de la calidad del agua en las 250 playas marítimas y 15 continentales de la Comunitat, superando así los requisitos de la normativa europea, que solo exige controles quincenales. “Tengo personal recogiendo muestras de lunes a viernes. Y si detectamos un posible vertido, se actúa de inmediato”.
Pero el cambio climático también está teniendo un impacto negativo. “El aumento de la temperatura del mar favorece la permanencia de bacterias, especialmente si encuentran nutrientes. Es un factor que complica aún más el trabajo de vigilancia”, reconoce.
Pese a estos retos, las autoridades quieren transmitir un mensaje de tranquilidad. “Si cerramos 3 o 4 playas, ten en cuenta que controlamos más de 250. La gente puede estar muy tranquila, porque el sistema de control funciona”, subraya la responsable autonómica. Los cierres, insiste, son siempre por seguridad y no por capricho.
Por eso, desde la administración también se hace un llamamiento al civismo: “Los usuarios debemos hacer nuestra parte. No tirar residuos en la arena, evitar colillas, recoger nuestros desperdicios... Todo lo que se abandona acaba, antes o después, en el mar”.
En definitiva, aunque las playas valencianas mantienen una alta calidad del agua, la combinación de factores naturales y humanos obliga a mantener una vigilancia continua. Y cuando se detecta un problema, se actúa con rapidez. Así se garantiza que podamos seguir disfrutando de nuestras costas con seguridad.