Dada la paupérrima situación de las arcas valencianistas, pese a los más de 60 millones asegurados por la venta de Rodrigo Moreno, Ferran Torres, Coquelin y Parejo (Garay se marchó con la carta de libertad), cualquier ingreso no previsto ha de recibir la más calurosa bienvenida. Y ésta podría venir por los traspasos de futbolistas que pertenecieron al Valencia CF tiempo atrás y a cuya salida quedara fijado un porcentaje en caso de que se produjera una posterior venta.

El caso más significativo es el del argentino Rodrigo De Paul que pasó sin pena, ni gloria por Mestalla y que, si se confirman algunas informaciones publicadas en Italia, le podría reportar a las arcas ches un dinero tan importante como inimaginable. Por él se pagaron 4,7 millones de euros al Racing de Avellaneda en el verano de 2014 y tras disputar 47 partidos de blanquinegro y anotar únicamente dos goles en el año y medio que perteneció al Valencia CF, encadenó una cesión a su club de origen y un traspaso al Udinese en julio de 2016 por 3,5 millones de euros fijos, más otro millón y medio en variables y un 15 por ciento de una futura venta.

Ahí viene el quid de la cuestión. Su rendimiento en la Serie A está siendo más que notable y hay informaciones que apuntan a un hipotético traspaso multimillonario bien a la Juventus de Turín, bien a la Lazio romana. Por poner un ejemplo, si se cerrara la venta en una cifra de 30 millones de euro (se habla de cantidades cercanas hy es su valor según Transfermarkt), el Valencia CF percibiría 4,5 kilos que la maltrecha tesorería del club que preside Anil Murthy recibiría con los brazos abiertos.

El Valencia CF percibirá el 15 por ciento de una venta de De Paul

Pero hay otros casos más allá del De Paul. El Valencia CF también se guardó un porcentaje de una posterior venta al dar salida a futbolistas como Salva Ruiz, Róber Ibáñez, Toni Martínez, Gonzalo Villar o Santi Mina, del que el entrenador del Lokomotiv de Moscú ha reconocido que está en la terna de los jugadores que le interesan. Cualquier venta del gallego superior a los 14 millones de euros le reportaría al conjunto che un 20 por ciento de esa cantidad, en concepto de plusvalía.

En sentido contrario, si el Valencia CF decidiera vender a Maxi Gómez, el Celta también percibiría un porcentaje de la plusvalía.