La provincia de Castellón afrontará con tranquilidad los meses más secos del año, el verano, gracias a las lluvias que se han registrado recientemente  y, principalmente, las de los últimos días.

Este último episodio de precipitaciones ha incrementado el nivel del agua embalsada con algunos pantanos que, incluso, llegan a superar el total de su capacidad, dejando imágenes nada habituales en las últimas décadas después de unas lluvias de récord siendo, por ejemplo en la capital entre el martes y el miércoles, el día con mayor cantidad de precipitaciones desde 1962.

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El caso más significativo es el de María Cristina que cubre las necesidades de un principal núcleo de población como es Castellón de la Plana y que supera la capacidad que puede albergar. Este pantano se encuentre a más del 100% del agua con la que puede contar puesto que su capacidad es de 18,43 hectómetros cúbicos y, a 2 de abril, tiene 22,40 y eso que está desembalsando agua porque sigue entrando en él.

También supera el 100% de su capacidad el de l'Alcora, que aunque es de menores dimensiones, cuenta con 1,43hm3.

Muy cerca de su máximo se hallan otros tres pantanos: Ulldecona, en la Pobla de Benifassà y que cubre las necesidades hídricas del norte de la provincia cuenta con 9,38hm3 de los 10,94hm3 de capacidad que tiene; en el de Onda hay 0,84hm3 de agua embalsada y tiene capacidad para 1hm3; Regajo cuenta con 4,89hm3 y puede contar con hasta 5,97hm3 y Sitjar, el de segunda mayor capacidad que tiene en estos momentos 42,38hm3 y puede llegar a los 49,29hm3.

Por último, el de mayores dimensiones y, por tanto mayor capacidad, Arenós, tiene en estos momentos 68,32hm3 y su almacenaje total es de 136,94hm3, aunque el embalse no puede acoger esta cantidad de reservas.