La ilustración pone la alerta ante el "boom" de dibujos generados por IA: "No está bien copiar a artistas y estilos"
El sector avisa del problema que puede generar el uso para cuestiones más allá de la diversión de esta herramienta, pero recuerda que sin su creatividad no podría existir.

José Enrique Puchol desde Urban Sketchers Castelló
Castellón - Publicado el - Actualizado
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Ha sido todo un trending topic desde el pasado fin de semana. Lo hemos visto en perfiles personales, de equipos deportivos, celebrities e incluso instituciones, que han aprovechado las novedades impulsadas por OpenAI para su herramienta más reconocida, ChatGPT, por el cual se pueden adaptar en pocos segundos una fotografía en un dibujo.
Muchos han sido los estilos pero uno en especial ha sido el más usado. El que asemeja el que durante décadas ha mostrado el japonés Studio Ghibli, reconocido por películas como El Viaje de Chihiro, La Princesa Mononoke o Mi Vecino Totoro.
Y justamente un verbo resulta clave en esta situación: asemeja. Porque esta copia digital de algo realizado a mano que se ha generalizado también ha encontrado una respuesta negativa en un colectivo en particular, que ve mancillado su trabajo. Hablamos de ilustradores, que justamente usando también esas redes sociales, han mostrado su malestar.
En COPE Castellón hemos hablado con un colectivo de dibujantes como es Urban Sketchers, un grupo que hace poco ha celebrado 5 años y que suma a decenas de personas que apuestan por el dibujo en vivo de espacios y momentos especiales de la capital. Nos explica más de su trabajo uno de sus portavoces, José Enrique Puchol: “Es un colectivo de personas que periódicamente quedan a dibujar, mínimo una vez al mes. Va desde espacios urbanos a eventos. Es un movimiento mundial de dibujantes urbanos que quedar, dibujar y después compartirlos”.
Un trabajo que por ejemplo han plasmado en las últimas fiestas de la Magdalena con una quedada para dibujar la gaiata ganadora. En esta cita u otras, la participación varía: “Funcionamos por redes. Tenemos cuenta en Instagram y Facebook y tenemos un grupo de Whatsapp donde comentamos las quedadas. Cuando hemos hecho encuentros, como en nuestro quinto aniversario, se reunieron más de 50 personas. El máximo ha superado los 60 con sus herramientas y su manera de dibujar”.
Un número de gente, muchos amateurs, que disfrutan con la pintura en vivo y que puede traer una cuestión: ¿la posibilidad de hacerlo sin esfuerzo puede lastrar a seguir haciéndolo? Puchol nos lo analiza: “Yo creo que no somos los que nos va a desanimar el que haya un sistema que genere dibujos, sí que será a nivel profesional. Pero es un problema no sólo de dibujantes. Es un tema complicado, y debe ser duro cuando te dedicas a la ilustración ver que se generan imágenes que a ti te suponen un trabajo intelectual y comes de ello. Veo la IA como una herramienta que debe liberarnos para avanzar en cosas que podemos hacer los humanos, pero hay intereses económicos y de optimización de tiempo que hace muy goloso lo que se genera con estas aplicaciones”.
Lo que sí recuerdan desde Urban Sketchers Castelló es que hay algo que, a día de hoy, la Inteligencia Artificial no puede dar y que sí lo tienen los ilustradores, incluso los que lo hacen por puro placer.
El portavoz del colectivo nos recuerda que la inteligencia artificial “no puede aportarnos la creatividad, esa facilidad de resiliencia, de cambiar y crear. Por ahora, aunque muy sofisticada, lo que hace es copiarnos, pero detrás se tiene que alimentar de nuestra creatividad”.
vigilar su uso profesional
Otro ejemplo de lo que puede suponer lo hemos encontrado en Vila-real. Allí, hace pocos días se ha conocido los ilustradores cuya obra será portada de los programas de las fiestas. Las de mayo, las de San Pascual, correrán a cargo de Carlos Chiva, que nos destacaba cómo le surgió la idea de un dibujo con protagonismo para la cremà y “su” Colla Gegantera, de la que es presidente: “Nos fijamos que hace años la gente los hacía suyos cuando empezaban a aparecer en los carteles, y no podían faltar”.
Una idea que ya tenía hace tiempo, y del que destaca que “cuando es la ofrenda, los “gegants” se ponen detrás de las festeras en el momento que se inicia la hoguera. Y ahí siempre me pareció chula la imagen por detrás de la reina con el fuego de fondo”.
Un trabajo para el que ha contado con la ayuda de las nuevas tecnologías, pero no de una manera tan exagerada como la IA: “Me gusta dibujar a mano pero el iPad te puede ayuda con texturas y demás”.

Carlos Chiva ilustra el programa de San Pascual 2025
Porque Chiva, en su caso, también pone en alerta sobre el uso profesional que se puede dar a estas ilustraciones, sobre todo cuando supera el aspecto más lúdico: “Diría que la gente piensa en su trabajo y qué ocurriría si lo pudiera hacer la IA. Usarla está bien para ciertas cosas. Para hacer imágenes de un cierto artista o estilo no está bien. Las modas que conllevan bombardearlo y explotarlo no me gustan”.
Lo que queda claro es que este aviso de un sector cultural es sólo el primer caso. Probablemente muchos otros, y en ellos la radio o esta publicación web, también corren el mismo riesgo ante este impulso de una herramienta que puede ser ayuda, pero también poner en riesgo muchos puestos de trabajo.



