¿Os imagináis lo que es escuchar constantemente un sonido continuo que resuena en la cabeza y que es imposible que pare? Pues esto es lo que sufren las personas que tienen acúfenos.

Se calcula que entre un 10 y un 17% de la población los sufren. Es un problema que no deja dormir, que desconcentra, y que, en definitiva, puede tener graves implicaciones en el día a día de las personas que lo sufren.

El problema es que no existe una terapia física, ni tampoco ningún medicamento que lo solucione. Muchos de los afectados, por tanto, deben recibir terapia psicológica, por un lado, para ayudar a convivir con este sonido constante y dejarlo en un segundo plano; y segundo, porque a menudo estas personas tienen problemas psicológicos, pueden llegar a caer en la depresión.

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¿Y cuáles son las causas de los acúfenos?

Hay distintas razones. Tres, fundamentalmente. La más frecuente es el trauma acústico, o la agresión del oído por el ruido. Se da sobre todo en gente que está expuesta a ruidos muy potentes.

Estamos hablando de músicos, personas que trabajan o que acuden a menudo a discotecas, o personas que trabajan en las carreteras con el asfalto, y que a menudo deben romperlo con martillos muy potentes.

La segunda causa más frecuente es su origen desconocido. Y la tercera es la presbiacusia, o lo que es mismo, la pérdida de la audición relacionada con la edad, y que puede ir acompañada de acúfenos. Otras causas las debemos buscar en traumatismos en la cabeza, algunos medicamentos y sus efectos secundarios, o tumores del nervio del oído.

La asociación de Personas Afectadas por Tinnitus, nombre con el que también se conoce a los acúfenos, reclama a la administración que cree un centro especializado con médicos de diferentes disciplinas para tratar a estas personas que los sufren.

Uno de los problemas con los que se encuentran los afectados es que la Seguridad Social no cubre, por ejemplo, el tipo de ayuda psicológica que necesitarían.

Uno de los afectos es Josep, que hace 18 años que sufre tinnitus. Al principio sentía este sonido de vez en cuando y era de poca intensidad. Pero después de tomar un fármaco que tiene efectos sobre el sistema auditivo, el ruido ya fue constante.

(ESCUCHA LA ENTREVISTA A JOSEP BORONAT AFECTADO POR ACÚFENOS)

Al principio, según ha explicado a COPE, lo llevó muy mal. Estaba constantemente pendiente de ese sonido y no podía ni concentrarse en el trabajo ni dormir.

Ahora ya ha aprendido a convivir con ese ruido. Y es que no hay ningún medicamento que lo detenga, ni ninguna terapia física. Por eso él ha necesitado ayuda psicológica.

En definitiva, y según asegura, ya ha integrado el acúfeno y es capaz de vivir sin oírlo. Por eso quiere transmitir este mensaje a otras personas que estén en la misma situación, que sufran tinnitus: “es posible convivir” con él.