Ansu Fati busca reencontrarse en Mónaco
El delantero arranca su segunda etapa fuera del Barça intentando recuperar el nivel que le permita volver a sentirse importante.

Ansu Fati durante un entrenamiento del Barcelona.
Barcelona - Publicado el
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El paso del tiempo a veces sirve para poner las cosas en su sitio pero en otras ocasiones puede distorsionar la realidad. Hoy habrá quien piense que darle en su día el 10 a Ansu Fati y coronarle como el heredero de Messi fue precipitado, un error. Y para nada. En aquella coyuntura tenía todo el sentido del mundo. Ansu Fati apuntaba a crack mundial sobre todo por su íntima relación con el gol y el aura que desprendía. Recordar que recién debutado en primera, con dieciséis años, salta al campo en el Sadar con el Barça perdiendo 1-0 y a los seis minutos ya marca de cabeza entre los centrales navarros. Se convierte en el futbolista más joven en marcar con el Barça en la liga con 16 años y 304 días. El gol es el bien más preciado en el fútbol y Ansu hacía gol con nada.
Si pudiera borrar un día de su carrera ese día sería en 7 de Noviembre de 2020, aquel partido contra el Betis. Persiguiendo un balón le traba Mandi y su pierna izquierda cede. Rotura del menisco interno de la rodilla derecha. Tarda once meses en recuperarse. La confianza del club en Ansu es total y hereda el 10 de Messi, que acababa de salir del club. Y el día de su regreso, partido contra el Levante, sale y marca. Su compañeros le levantan en hombros en una imagen para el recuerdo. Su relación con el gol está intacta. Estamos en septiembre del 2021. Un mes más tarde renueva hasta el 2027 con una cláusula de 1.000 millones. Ansu y los suyos viven felices pero la historia se tuerce un mes más tarde con la lesión de isquios en Balaídos. Ansu entra en una espiral de lesiones que le ha impedido recuperar la chispa y la relación en el gol que venía de serie.
Tuvo que salir a tratar de recuperarla en el Brighton pero no va del todo bien. Las lesiones le persiguen. Vuelve al Barça donde ya se encuentra con Hansi Flick. Cuando parece que está recuperando sensaciones otra lesión esta vez en el pie. El equipo va como un avión y a Ansu no le ha dado para subirse. Él cree que ha merecido más minutos. El míster le ha dado los que ha considerado. No le ha quedado otra que volver a salir tras ampliar hasta 2028 y el destino elegido ha sido el Mónaco. Liga físicamente muy exigente la francesa. Ojalá pueda volver a sentirse importante allí.