Cómo lavar bien las verduras para eliminar los pesticidas sin dañar tu salud
El lavado con agua, vinagre o bicarbonato puede reducir de forma significativa los residuos químicos en frutas y verduras frescas.

Cómo lavar bien las verduras para eliminar los pesticidas sin dañar tu salud
Barcelona - Publicado el
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Cada día más personas se preocupan por lo que comen y de dónde proviene. Una de las inquietudes más frecuentes es la presencia de pesticidas en frutas y verduras, incluso después de haber sido cosechadas. Aunque la mayoría de los productos cumplen con los límites legales, siempre quedan residuos que pueden reducirse con una buena limpieza en casa.
El paso más básico y efectivo es lavar las verduras bajo el grifo con abundante agua. Aunque parece obvio, no siempre se hace correctamente. Este proceso por sí solo puede eliminar hasta un 80% de los pesticidas presentes en la superficie.
Sin embargo, no es recomendable usar jabón, lejía o productos químicos de limpieza domésticos, ya que no están formulados para alimentos y pueden dejar residuos dañinos.
En su lugar, hay métodos naturales y seguros, como:
Cepillar las verduras con una esponja o cepillo limpio también es útil, sobre todo en productos con piel rugosa, como zanahorias, pepinos o calabacines. En el caso de las hojas verdes como la lechuga, espinaca o acelga, es aconsejable separar hoja por hoja y enjuagar con cuidado.
A pesar de estas técnicas, algunos pesticidas son sistémicos, lo que significa que la planta los absorbe internamente. En estos casos, la mejor opción es consumir productos ecológicos o de proximidad, que limitan o eliminan el uso de químicos sintéticos.
Otras prácticas recomendables son:
Estas rutinas de higiene doméstica no solo eliminan pesticidas, sino también restos de tierra, polvo, bacterias o contaminantes del transporte y manipulación.
En especial para personas vulnerables como niños, embarazadas o personas inmunodeprimidas, reducir el consumo de pesticidas es un paso importante hacia una alimentación más segura.
En conclusión, lavar bien los vegetales es un gesto sencillo que puede mejorar notablemente la calidad de lo que comemos. Con métodos naturales y un poco de tiempo, podemos proteger nuestra salud sin renunciar al sabor y frescura de los alimentos frescos.