La crisis económica provocada por la pandemia está arrastrando a muchos sectores a una situación muy delicada.

Uno de los sectores que hace ya más de un año que no trabaja es el de los feriantes catalanes. Son ya 15 meses de freno y falta de ingresos mientras han de continuar haciendo frente a sus hipotecas e impuestos.

En la Linterna Cataluña hemos hablado con Marcos Orús, Presidente del Gremio de Industriales Feriantes de Barcelona y Provincia “Lo tenemos realmente complicado para trabajar este año. La única ayuda que hemos recibido en estos 15 meses son 6.000 euros y después de muchos días de movilización” nos explica Orús.

Con planes de seguridad aprobados pero dependientes de los ayuntamientos

El presidente del gremio deja clara su decepción cuando nos explica que son el único sector al que no le han dejado demostrar que son seguros “es muy significativo, no nos han dejado demostrar que la feria es segura. Hay dos luchas constantes, por un lado el Procicat, que al final nos aprobó el plan de seguridad y, por otro lado, tenemos los ayuntamientos que son los que han de acabar autorizando la actividad en su municipio” se lamenta Orús.

Los motivos de los ayuntamientos son claros. Evitar aglomeraciones en las atracciones o ferias. Esto el sector lo tiene claro pero el presidente de gremio lo dice claro “entendemos que en el formato fiesta mayor despierte recelo, aunque hay actividades que sí lo han hecho. Nosotros propusimos otro formato más reducido, en recintos cerrados ventilados con control de acceso. Pero ni eso nos han dejado intentar”

Planteamientos de movilizaciones

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Marcos Orús nos explica que ya “el año pasado hicimos varios actos de protesta como salir con los camiones, protestas delante de la Generalitat, en el Parlament... estábamos desesperados. ¿qué familia puede vivir con esto durante 15 meses?” se pregunta el presidente “Nos han dicho que nos esperemos porque hace poco que nos concedieron la última ayuda pero debemos seguir haciendo frente a nuestras hipotecas e impuestos. Lo que está claro es que la vía del diálogo, el ser buenas personas, no sirve con esta gente así que algo haremos.” Concluye el presidente del gremio de industriales feriantes de Barcelona y provincia.

La situación es difícil y, sin duda, aún nos queda mucho camino por recorrer antes de salir de este pozo.