El antes y el después de la tromba de agua en Valladolid en el interior del bar El Niño Perdido

La tromba de agua descargó en poco más de una hora sobre Valladolid 30 litros de agua por metro cuadrado. A pie de calle las acumulaciones de agua llegaron a alcanzar el medio metro de altura. La peor parte se la llevaron los comerciantes y hosteleros con sus locales bajo suelo, donde las inundaciones llegaron a levantarse hasta metro y medio.

"Incertidumbre" y "angustia" son las sensaciones que se le vienen a la cabeza al dueño del bar El Niño Perdido. Como pueda apreciarse en las imágenes a las que ha tenido acceso COPE, el agua caía por las escaleras como si fuera una cascada convirtiendo el suelo del establecimiento en una enorme balse de agua. En ese momento, confiesa, aparecen también la rabia y la impotencia al ver que "no puedes hacer nada", únicamente "esperar a ver qué pasa".