El expediente sancionador abierto a la Iglesia de San Benito, en Valladolid, ha provocado una fuerte contestación social. Dos días después de que la Policía Municipal levantara acta tras la denuncia de un particular, en forma de largas colas de feligreses a las puertas de esta iglesia conventual esperando para entrar a misa. Y ahora, por medio de una recogida de firmas a través de la plataforma Change.org.

La petición está dirigida a la Junta de Castilla y León, a su presidente, Alfonso Fernández Mañueco (PP), y al vicepresidente y portavoz, Francisco Igea (Cs). En ella se solicita la supresión del ‘numerus clausus’ que impide la participación de más de 25 personas en celebraciones religiosas.

Su impulsor, Félix del Barrio, considera “injustificada” esta medida para la contención del COVID-19. Propone que se establezca un porcentaje de aforo “atendiendo a la capacidad y superficie” de los lugares de culto. Al igual que ocurre con las terrazas de los locales de hostelería —abiertas a un 75 por ciento de su capacidad habitual— o los teatros —a un tercio, en el caso de disponer de butacas preasignadas—.

Este ‘numerus clausus’ es una de las “medidas excepcionales” acordadas el pasado 15 de enero por la Junta de Castilla y León para el Nivel 4 de alerta, en el que actualmente se encuentran las nueve provincias de la Comunidad. E impide que con independencia del tamaño y del aforo de los lugares de culto, así como de si se trata de espacios cerrados o al aire libre, se pueda superar en 25 personas el número de asistentes a ceremonias nupciales y otras celebraciones religiosas.

Arzobispado y alcalde, alineados

A efectos prácticos la norma supone tratar de igual modo a iglesias como la de San Benito, una de las de mayor dimensión con 1.600 metros cuadrados de planta, que a otros templos de menor tamaño.

“Falta equidad”, subrayan desde el Arzobispado de Valladolid remitiéndose al comunicado firmado conjuntamente por los obispos y arzobispos de todas las diócesis de Castilla y León a principios del mes de enero en el que ya señalaban que este criterio es “injusto por desproporcionado”.

El alcalde de Valladolid, Óscar Puente, se ha alineado con la posición crítica de la Iglesia. “El cumplimiento de la Ley”, ha afirmado, “no impide su crítica cuando es manifiestamente injusta”.

Ayer la @PoliciaVLL tuvo que levantar acta en la Iglesia de San Benito por un oficio religioso en un templo de 1800m2 de planta con apenas 50 personas en su interior. El cumplimiento de la Ley, como bien señala el obispo, no impide su crítica cuando es manifiestamente injusta. https://t.co/qa9J7Njgz4

— Oscar Puente (@oscar_puente_) February 6, 2021

Este ‘numerus clausus’ amenaza el desarrollo de los cultos propios de la Semana Santa. Las juntas de cofradías han pedido a Francisco Igea su revisión. Según el presidente de la Junta de Semana Santa de Medina de Rioseco, Antonio Herrera, el vicepresidente y portavoz del Gobierno autonómico se comprometió a estudiarlo. “Aunque realmente nos los ha puesto muy difícil”, reconocía.