“No somos el problema”, así reza el lema de la protesta que los hosteleros del ocio nocturno han protagonizado hoy en Valladolid. La movilización, simultánea en 52 ciudades de toda España, se ha trasladado a las puertas del SEPE para reclamar agilidad del pago de las ayudas ante el cierre de los establecimientos decretado para el control de la pandemia y con un toque de queda indefinido en Castilla y León de diez de la noche a seis de la madrugada.

Con el apoyo de la Asociación de Hostelería de Valladolid denuncian el alto porcentaje de trabajadores que aún no ha cobrado los ERTE. Reclaman el pago único “para todas estas familias que también necesitan comer”, explica la presidenta, María José Hernández.

Durante el acto se ha podido leer un manifiesto en el que se ha denunciado la criminalización que sufre la hostelería, y en especial los establecimientos de ocio nocturno, “a los que las administraciones no nos tratan como empresarios”. Temen que el cierre del sector sea inminente si las medidas de apoyo no llegan. Calculan que podríamos estar ante el cierre de la mitad de los establecimientos que en Valladolid se dedica al ocio nocturno.

Reclaman prolongar la vigencia de los ERTE hasta el nueve de mayo, fecha en la que expira el actual Estado de Alarma, activar el pago único de “todos los errores cometidos por el SEPE” en la primera fase de los ERTE, así como el abono de todas las deudas pendientes con los trabajadores afectados por el cierre de sus empresas. Solicitan el establecimiento de unos criterios únicos de aplicación e interpretación de los ERTE, así como la recuperación total de las exenciones por las cotizaciones sociales de los trabajadores afectados por el cierre tras el toque de queda.