Videollamadas, reuniones múltiples y virtuales, herramientas online para trabajar en tiempo real... Son algunas de las opciones que se han colado en la cotidianidad, durante la época de confinamiento que ha traído la pandemia del coronavirus. Si hace solo unos meses, quienes desarrollaban teletrabajo eran una minoría, al igual que los que eran habituales en el uso de esas tecnologías, en los últimos dos meses, multitud de personas se han tenido que sumar a este ámbito.

Por eso, el consumo de las herramientas asociadas a las nuevas tecnologías ha aumentado de manera determinante. Lógicamente, también el de internet, aunque no solo para las conexiones ligadas al trabajo, sino también para mantener el contacto con familiares y amigos, tal y como ha confirmado en COPE el director general de Globales, Alfonso Rincón.

Y como estamos en España, y las cosas se suelen dejar para el último momento, al surgir esta necesidad no han sido pocos los que han detectado disfunciones en sus dispositivos, por lo que también ha aumentado la necesidad en ese apartado. Así, han crecido las ventas de software y hardware y las consultas y peticiones relacionadas con tablets, portátiles, cámaras o programas antivirus. Sin embargo, Alfonso Rincón ha destacado el auge en la búsqueda de impresoras, fundamentalmente basada en la necesidad de imprimir los deberes escolares de los niños.

Es verdad que, en cierta medida, a muchos les ha sorprendido la llegada de esta nueva manera de trabajar para ellos, porque el teletrabajo necesita equipamiento. Por eso, no solo los particulares se han movido, sino que las propias empresas se han visto en la necesidad de dotar a sus empleados, para garantizar su actividad desde el domicilio. Y aunque todo parece haberse precipitado, "ya es realidad". El teletrabajo puede haber llegado para quedarse, recorriendo en semanas un camino que, de otro modo, quizá habría durado años.

Sin embargo, el avance de la tecnología también suele coincidir con la aparición de voces que alertan sobre su supuesto perjuicio. Es lo que ha sucedido con el 5G. Precisamente, Segovia ha sido uno de los municipios españoles (junto al toledano de Talavera de la Reina) donde se ha testado esa tecnología. Rincón ha reconocido que siempre que aparece una nueva potencialidad, hay voces en contra, pero ha negado manejar evidencias de que el 5G sea perjudicial para la salud y ha agregado que la tecnología tiene que seguir avanzando y que lo seguirá haciendo. Tanto, que no imaginamos de lo que será capaz en los próximos años.