Ponemos fin a las celebraciones del mes del Tiempo de la Creación, del Jubileo por la tierra. Precisamente en este cuatro de octubre, día de san Francisco de Asís, autor del ‘Cántico de la Criaturas’, y considerado como el santo católico de aquellos que promueven el cuidado de la ecología. En este Tiempo de la Creación, enmarcado en la conmemoración del quinto aniversario de la encíclica del Papa Francisco ‘Laudato Si’, toda la familia cristiana nos hemos unido en torno a un propósito común: concienciarnos de la importancia del cuidado de lo que todos compartimos, nuestra casa común.

A lo largo de este mes, la Diócesis ha formado parte activa de las celebraciones a nivel mundial con acciones particulares durante el novenario a la Virgen de la Fuencisla, la conferencia de Gabriel López Santamaría (coordinador en España del Movimiento Mundial por el Clima) o el lanzamiento de un concurso de fotografía de temática medioambiental con tres categorías: infantil, juvenil y adulta y cuyas bases pueden consultarse en la página web del Obispado, www.obispadodesegovia.es. De esta forma, la diócesis da cuenta, y lo seguirá haciendo de cara al futuro, de su implicación, no solo con la sociedad en la que se integra, si no con la conservación del medio ambiente, de lo creado por Dios.

De otra parte, en este curso pastoral, la diócesis, con su pastor D. César al frente, quiere poner el foco en las familias. En la importante labor que, como pequeña iglesia doméstica, realizan en la enseñanza e inculcación de la fe. Una de las cosas que hemos aprendido de esta pandemia es que las familias son el pilar fundamental en la educación. Por eso, para cuidar de las familias y las personas que las integran, la diócesis cuenta desde 1997 con el COF, el Centro de Orientación Familiar.

Un centro cuya labor es poco conocida por muchos ciudadanos de Segovia. Por este motivo, esta semana hemos querido dar voz a la recién nombrada directora del centro, Sonia Sanz, y a la psicopedagoga del COF, Noelia Bravo. Ellas son las que nos han sumergido en el equipo y las labores del centro de orientación y han perfilado las líneas que quieren seguir de aquí en adelante.

Como ha contado Sonia, el centro es un lugar donde poner a disposición de las familias y de las personas en general un equipo de personas para ayudar a conocer las causas de sus problemas y ofrecerles recursos para aprender a solucionarlos. Además, la directora del COF ha asegurado que la mayor virtud que tienen es el equipo humano con el que cuentan: profesionales en mediación, psicólogos, médicos, abogados, trabajadores sociales, psicopedagogos…

Y son personas que cuidan de personas. Según recoge la memoria del pasado año, el COF se implicó en 123 atenciones que, como Sonia recalca, no son solo 123 personas, sino todas las familias y los entornos a los que éstas pertenecen. Cuando acuden al centro, es Noelia la primera en recibir a las personas para

realizarles una pequeña entrevista en la que se pueda determinar qué profesional es el que mejor puede responder su necesidad. No obstante, eso no quiere decir que se limiten a una única atención, puesto que la asistencia es integral e interdisciplinar.

El Centro de Orientación Familiar tampoco ha sido ajeno a la pandemia, pero en todo momento han estado atendiendo vía telefónica y ahora, también físicamente cumpliendo las medidas sanitarias establecidas.

De cara al futuro, Sonia (quien tan solo lleva cuatro meses al frente del COF) explica que el mayor reto es que el centro cale en la sociedad, que los segovianos sepan que hay profesionales dispuestos a ayudarles en la resolución de sus problemas con la mayor objetividad y discreción.

Finalmente, tanto Sonia como Noelia han querido transmitir un mensaje optimista y trasladar a aquellos que puedan necesitar de su ayuda que en el COF nadie es prejuzgado y pueden estar tranquilos puesto que serán atendidos por profesionales que les enseñarán como escucharse a sí mismos y cuidar no solo de su salud física, sino de su salud mental y espiritual.