Cuidarse se ha vuelto imprescindible en estos tiempos de pandemia. En marzo de 2019 la sociedad se paró para contener al virus, pero fue gracias, entre otros, al sector primario que pudimos seguir con lo esencial de nuestra vida. Se puso de manifiesto para la sociedad la importancia que siempre tuvo el sector primario. Mirat Fertilizantes estuvo, está y estará con los agricultores cuidando de las tierras para que ellos cuiden de todos.

Mirat Fertilizantes es una empresa familiar que pertenece al Grupo Mirat. Comenzó su andadura hace más de 200 años en Salamanca y su seña de identidad se ha convertido en imprescindible en la historia de la ciudad. Mirat llegó con sus fertilizantes NPK “complejos” en 1963 a los cultivos de la provincia y desde entonces se han convertido en un básico para los más de 9.000 agricultores de Salamanca y los del oeste peninsular. Mirat Fertilizantes está presente no solo en la agricultura, sino también en jardinería y hortofruticultura y a través de otras compañías del Grupo en otros sectores donde ha marcado también su impronta particular.

Dentro de la gama de productos sólidos fabricados en Mirat, encontramos los NPKs convencionales de la mano Forterra. Para los que apuestan por un fertilizante de liberación lenta, disponen de Fertilent, el cual está basado en un efecto bacterioestático estabilizando el nitrógeno amoniacal, con lo que se consigue evitar la contaminación de acuíferos. Cuentan también con fertilizantes de aplicación única, Unifertil, y completan su gama con los nitrogenados de la línea Nitrosulfam, que al carecer de nitrógeno nítrico contribuye a la protección medioambiental.

Destaca por su vocación de servicio la actividad de Mirat Agroservicios, distribuyendo y aplicando fertilizantes líquidos, fitosanitarios y semillas.

La finalidad actual de Mirat es mantenerse como líder en el cuidado y la conservación de las tierras de cultivo con productos de primera calidad. Sin olvidar la seriedad de la compañía y su tenacidad histórica para realizar bien las cosas, pone el máximo empeño en innovar y estar pendiente de todas las tecnologías que puedan ayudar al agricultor.

Su deseo sería ayudar a valorizar la importancia del sector primario en el bienestar de toda la sociedad, en la que todos somos esenciales.