El pueblo de Castilla y León que ha pedido pasar a ser parte de Galicia porque no tiene carretera: pudo ser una gran sede nacional
Esta localidad ha vivido un proceso muy caótico porque no llegaron ni siquiera a tener una carretera propia... pero también pidieron ser una sede importante en España

La historia de Fuente de Oliva es muy curiosa
Madrid - Publicado el
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En los últimos años, el fenómeno de la despoblación rural ha dejado un rastro de pueblos casi fantasma en toda España. Muchos de ellos han perdido servicios básicos como escuelas, centros de salud o transporte público, lo que ha obligado a miles de vecinos a abandonar sus casas en busca de una vida más fácil en las ciudades.
Aunque la despoblación afecta a muchas regiones, en zonas como Castilla y León el problema se agrava por la falta de inversiones e infraestructuras. Frente a este panorama, algunos pueblos no solo reclaman ayudas, sino que incluso han llegado a plantearse abandonar su comunidad autónoma. Ese fue el caso de Fuente de Oliva, un pequeño núcleo en la comarca leonesa de El Bierzo, que en 2022 solicitó oficialmente pasar a formar parte de Galicia.

Fuente de Oliva está justo en la frontera con Galicia
FUENTE DE OLIVA, EL PUEBLO SIN CARRETERA
Apenas un kilómetro separa a Fuente de Oliva de la frontera entre León y Lugo. Pero para sus vecinos, la diferencia entre un lado y otro es mucho más que una cuestión de mapas: es una cuestión de atención, servicios y dignidad. En enero de 2022, este pequeño pueblo expresó su deseo de dejar de pertenecer a Castilla y León y formar parte de Galicia, después de años de sentirse completamente abandonado por sus administraciones.
Los habitantes aseguran que no piden mucho. Solo una atención sanitaria y, sobre todo, una simple carretera con la que salir y entrar fácilmente en el pueblo. Llevaban un año presentando escritos a la Junta de Castilla y León y también a la Xunta de Galicia para reclamar mejoras, sin mucho éxito.

Fuente de Oliva carece de atención sanitaria y de una simple carretera
Uno de los principales motivos de esta insólita petición fue la falta de una carretera que conecte de forma segura Fuente de Oliva con otras localidades cercanas. En concreto, solo tenían una pista de tierra que el gobierno de la comunidad autónoma prometía asfaltar. Pero nunca llegó a ser así, y de ahí gran parte del enfado. La opción que más apoyaban los vecinos era la conexión con la aldea gallega de Castiñeiras, en el municipio de Cervantes (Lugo), por todas las conexiones que existen entre el Bierzo y Galicia.
A esta falta de comunicación se suma la escasez de servicios sanitarios. En el municipio de Balboa, al que Fuente de Oliva pertenece administrativamente, solo hay un médico que pasa consulta unas horas un día a la semana. “Es como si no existiéramos. Vivimos los problemas reales de la España vaciada”, afirmaba su representante vecinal.
El pueblo denuncia la falta de inversión en una simple carretera que nunca llega
LA PROPUESTA PARA ALBERGAR LA SEDE DE LA AGENCIA ESPACIAL ESPAÑOLA
Lo más llamativo del caso fue la reacción política. Mientras desde la Diputación de León no gustaron nada las críticas y se mostraron molestos por la denuncia pública, en Galicia, tanto el presidente de la Xunta en ese momento, Alberto Núñez Feijóo, como el alcalde de Cervantes, Benigno Gómez, se mostraron comprensivos con la situación. Feijóo incluso expresó su simpatía con la propuesta, aunque matizó que la decisión final le correspondía al entonces presidente de Castilla y León, Alfonso Fernández Mañueco.
Por su parte, los alcaldes de Balboa y Cervantes llegaron a reunirse para intentar buscar soluciones conjuntas que permitieran mejorar la calidad de vida de los vecinos de esta zona de montaña tan olvidada como hermosa.

La Agencia Espacial Española fue a parar finalmente a Sevilla
Lejos de resignarse, los vecinos de Fuente de Oliva sorprendieron al país con una propuesta tan ambiciosa como simbólica: quisieron acoger la sede de la Agencia Espacial Española, que finalmente está en Sevilla. Sí, un pequeño pueblo leonés, con apenas una decena de habitantes, ha presentado formalmente su candidatura para albergar uno de los proyectos tecnológicos más importantes del Gobierno central.
La idea nació durante una reunión vecinal, en la que los habitantes de Fuente de Oliva, encabezados por su pedáneo Fernando Cerezales, analizaron las ventajas que podría suponer para la zona. Tras un debate ilusionante, se celebró una votación en la que, por unanimidad, se decidió presentar la candidatura al Ministerio de Ciencia e Innovación.