Anaical, el refresco con alma de Laciana (León) que conquistó a toda una generación
La historia de un refresco nacido en Villablino que hizo historia en toda la provincia y que hoy busca renacer desde Rioscuro con “agua con alma”

Foto: En.todocoleccion.net
Ponferrada - Publicado el
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Aquellos mozalbetes que hoy frisan los 90, forjados al amor de los filandones, en las hacenderas, la siega, la siembra o a la sombra del calecho, fueron hijos de su tiempo, de la mina y de la obligada emigración. Seguramente todos ellos recordarán, pues las vivencias habitan en un recodo de la memoria y caprichosas nos toman al asalto… tal vez paladeen incluso el sabor del famoso Anaical de naranja o de limón, refresco mítico que ya en su nombre rendía homenaje a Laciana (nombre tomado de leer al revés el de su comarca de origen) y competía además con marcas señeras como Fanta, Kas o Mirinda.
Los inicios de una familia visionaria
Anaical es la historia de la familia Arias, Evencio e Isaac, dos emprendedores de Laciana que allá por los años 20 del pasado siglo vieron el negocio en los refrescos. Fundadores de la empresa familiar, esta popular bebida se fabricaba en Villablino y se distribuía por la comarca con su impresionante flota de camiones con viseras rotuladas. El salto a Rioscuro
Más tarde, Aurelio Arias decidió trasladar la planta embotelladora a Rioscuro, cercana al afamado manantial de agua de reconocidas propiedades, donde montó la fábrica de refrescos.
Un éxito que marcó época
Anaical pronto conquistó los bares y las tabernas de la provincia, e incluso dio nombre a una conocida orquesta. Anaical batía récords de ventas. Sin embargo, con los años nuevas marcas comenzaban a asomarse por el horizonte, desbancando a este popular refresco que no pudo resistir el poder económico de las grandes multinacionales.
Un legado que busca renacer
En Rioscuro, en el antiguo caserón de los Arias, al que todavía respeta la herrumbre y el paso del tiempo, resuenan los ecos de un pasado glorioso que busca recuperar su esplendor, convirtiéndose en una nueva planta embotelladora.
Ahora orientada a comercializar el agua minero-medicinal rica en bicarbonatos y sulfatos, procedente del manantial de Rioscuro, junto con un Museo del Agua, edificios ubicados en la antigua nave que ocupara Anaical, con el atractivo eslogan “Agua con alma, desde Villablino al mundo”.
Creando un centenar de puestos de trabajo, lo que ayudaría a reactivar la maltrecha economía de Laciana tras el cierre de las minas, perpetuando así el sueño de la familia Arias.

Sobre la colaboradora de COPE: Silvia Rodríguez
Silvia Rodríguez es colaboradora de COPE Bierzo desde el 24 de junio de 2019. La podréis leer y escuchar los lunes en la sección de opinión bajo el título ‘Silvia en COPE Bierzo’ y los fines de semana en ‘Con otra perspectiva’, disponibles en Cope.es/Bierzo.
Licenciada en Filología Inglesa por la Universidad de Salamanca, Silvia decidió estudiar esta carrera por su pasión por la lengua y la literatura. Disfruta leyendo, escribiendo y escuchando buena música. Además, es feliz trabajando en equipo y cree firmemente que “estamos aquí para ayudar y hacer felices a los demás”.
Silvia también es socia fundadora del Banco de Alimentos del Sil y colabora con esta ONG que realiza una labor destacada en la comarca. Enamorada de la enseñanza, es profesora de inglés, lengua y literatura en la Academia Corcal. Se define como una persona vital, alegre, optimista y con gran sentido del humor. Además, realizó el prólogo del libro ‘Chuma. El Valle del Silencio’ del escritor Miguel Velasco Nevado.

Silvia Rodríguez, colaboradora de COPE



