Los vecinos de los pueblos de la N-120 en Burgos volverán a colapsar la nacional para seguir reclamando la A-12: "Muchos sinsabores"

Los vecinos de los pueblos vertebrados por la N-120 están hartos de promesas incumplidas. La construcción de la A-12, la autovía de Logroño, es una reivindicación que cumple ya 4 décadas. En estos 40 años decenas de vidas se han ido en la carretera, una de las más peligrosas de la provincia burgalesa.

Para que te hagas una idea. Cuando se liberalizó la AP-1, la carretera de Vitoria acumulaba una media de 9.500 vehículos en el nudo de Pancorbo. Esta N-120 alcanza más de 13.000 en Castañares y más de 7.000 en Ibeas de Juarros. Y de todo este tráfico, el 20% son camiones.

una década de promesas incumplidas

En los últimos meses se ha dado un ligero paso hacia adelante con la aprobación del proyecto del tramo entre Burgos e Ibeas de Juarros, pero esto no es suficiente. De hecho, durante la última década han visto muchos pasos atrás. "En torno a 2016 también se tenía el proyecto de Ibeas a Burgos. Luego, todos conocemos que actualmente no hay ni un solo kilómetro inaugurado en la provincia de Burgos. También teníamos los proyectos del tramo de La Pedraja y de Belorado. Los proyectos no se han licitado. Por lo tanto, no es solo que se hagan los proyectos, porque son avances que ya se ha demostrado en el pasado que no llevan a ningún lado", ha recordado en COPE el alcalde de Belorado, Álvaro Eguíluz.

Y lo peor, cuando este tema ha salido en el Congreso o el Senado, nunca han visto voluntad política por llevarlo a cabo: "Lo que no puede ser es que el ministro, en el Senado, diga que para 2040 no puede garantizar que la que la autovía esté hecha. Una cosa es ser realistas con los plazos y otra es que haya falta de voluntad política en el desarrollo de esta autovía", cuenta el alcalde de Belorado, una de las localidades por las que transita la N-120.

la movilización de este viernes volverá a colapsar la n-120

Para seguir poniendo el grito en el cielo, los vecinos de estas localidades se movilizan cada viernes durante el último año. En total, cerca de 50 manifestaciones, haga frío o calor. Ahora, este viernes celebrarán su segunda marcha lenta en coche a lo larga de la N-120, desde Villamayor del Río hasta la localidad de Villafranca Montes de Oca, circulando a la menor velocidad que permite la vía.

"No pedimos milagros. No queremos que la autovía en los 55 kilómetros que quedan pendientes esté terminada en 2030. Lo que sí que queremos es tener una planificación de cuándo se van a ejecutar esos proyectos, cómo se les va a dotar presupuestariamente, los plazos de ejecución y cómo se va a financiar", explica Eguíluz.

Con esta nueva movilización, los vecinos de las localidad afectadas continúan mostrando su hartazgo ante lo que consideran es desidia e inoperancia de las administraciones.