La provincia de Ávila subió en 2023 un 3,8 por ciento sus exportaciones, alcanzando una facturación de 171 millones de euros por este concepto, según datos del ICE, el Instituto de Competitividad Empresarial de la Junta de Castilla y León. Sin embargo es un campo en el que los abulenses todavía tienen que avanzar, ya que fue la provincia con menos exportaciones de Castilla y León. Para que te hagas una idea Zamora, que ocupa la antepenúltima posición en exportaciones facturó 351 millones de euros y muy lejos quedamos de los más de 7.500 millones en exportaciones que facturó Valladolid siendo líder en la comunidad.

Además las piezas que fabrica Nissan o de los quesos de Ornua, te sorprendería conocer algunos de los productos que se exportan desde la provincia. Como curiosidad desde Ávila se exportan por ejemplo halcones a países árabes. También diseño y arquitectura sostenible. Esto es precisamente a lo que se dedica la empresa abulense, Nagami. Miguel Ángel Jiménez, cofundador de la compañía nos ha explicado que utilizan robots industriales con tecnología propia, de manera que sus proyectos cobran vida gracias a la impresión en 3D de gran formato. Hasta China, Estados Unidos, Arabia, Dubai y varios países europeos han llegado sus diseños atrevidos, diferentes y vanguardistas.

Dior, Cartier, Caixa Forum, el Real Madrid, Ecoalf o Bornlivingyoga están entre sus clientes. El secreto de su éxito, según Miguel Ángel está en “ser diferentes, con diseños atrevidos que llevan la tecnología al límite”.

Cuenta Miguel Ángel que trabajan con clientes “de mercados y culturas muy diferentes”, cada uno de ellos con exigencias y peculiaridades que hay que atender.

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Nagami comenzó su actividad en 2016 de la mano de los hermanos abulenses Miguel Ángel y Manuel Jiménez y su socio Ignacio Viguera. Fue fruto de años anteriores de investigación. En la actualidad son 42 personas en plantilla, a las que hay que sumar los puestos de trabajos temporal en picos de producción.

Una empresa abulense que no se ha puesto límites en el globo terráqueo yque ha elegido Ávila como sede de su actividad, porque asegura Miguel Ángel que “es el lugar perfecto para emprender”.