Unas 150 personas se han concentrado frente a la Subdelegación del Gobierno en Ciudad Real para protestar por la grave situación que atraviesa la hostelería y reivindicar medidas de apoyo en favor de este sector.
Los hosteleros de Ciudad Real piden que no se criminalice a este sector porque, según el presidente provincial y regional de la Asociación de Hostelería y Turismo, Pepe Crespo, “no se ha podido demostrar científicamente que los bares sean los principales focos de contagios de coronavirus” y ha señalado que “la limitación de horarios para la restauración no ha significado un descenso en el número de casos positivos”.
Los hosteleros solicitan que el Gobierno les escuche y que se puedan prolongar los ERTEs al menos hasta la Semana Santa del año que viene, “porque de lo contrario” ha asegurado Crespo “muchos establecimientos podrían cerrar”. El sector calcula que la facturación ha bajado un 40%, aunque José Crespo cree que la situación de la hostelería en la provincia no está peor que en otros lugares ya que aquí no se depende tanto del turismo.