El proceso de adjudicación del coso de la calle Feria se encuentra inmerso en un momento de total incertidumbre. Lo que parecía ser un concurso más o menos tranquilo, ahora mismo vive esa calma tensa con un desenlace totalmente impredecible y de consecuencias imprevisibles para el futuro taurino de la ciudad, al menos durante un año. Los distintos intereses empresariales parecen darse cita en el Ayuntamiento de la capital, con distintas formas y maneras de gestión taurina, unido a la incógnita de si podrán organizarse festejos o no en septiembre en Albacete y con qué aforo, lo que es la madre del cordero. Porque mientras que en Castilla–La Mancha se han dado toros en 2020 y 2021, en otras regiones no ha habido ni parece habrá de manera inmediata, por lo que la capital albacetense puede ser una buena oportunidad de mercado taurino, es decir, un coso interesante a corto y medio plazo ante la dura situación que está atravesando el sector de la tauromaquia.

Pues en esas estamos, a escasas horas de que termine el plazo de licitación: tras la formalización de Simón Casas junto a Manuel Amador para lanzar una futura oferta y ser adjudicatarios de la plaza, leímos en La Tribuna de Albacete que Carlos Zúñiga y Ramón Valencia estarían estudiando si presentarse o no, unido al interés ya conocido de José María Garzón con su empresa, Lances de Futuro. Y esto ya es cosecha propia, quizás haya alguna sorpresa de última hora y sobre la bocina. Igual que en una partida de póquer donde todos miran a todos y parece que está en juego algo más que la gestión de una plaza de toros.

También llama la atención que, a diferencia del anterior proceso de adjudicación que resultó desierto, ANOET (empresarios), UCTL(ganaderos), la Unión de Toreros, UNPBE(cuadrillas) y la Fundación del Toro de Lidia mandaron una carta conjunta donde criticaban duramente el pliego elaborado por el Ayuntamiento, llegando a pedir la retirada del mismo. En esta ocasión, a pesar de ser un documento continuista con el anterior y que no gusta en general, las críticas públicas casi brillan por su ausencia. Por eso, por buscar un símil, la partida a las siete y media se sigue desarrollando así: un casi seguro licitante mostró un cinco, entonces los demás anuncian, cuando está a punto de terminar la partida, que se están pensando si coger o no una carta del mazo y mostrarla, por lo que el que jugó primero ahora tiene la duda si coger otra carta, con lo que podría acercarse más a la deseada cifra, aunque también con la posibilidad de pasarse. La resolución definitiva de todo esto la tendremos el martes y ahí será cuando quedarán esclarecidas las motivaciones de cada uno, es decir, si hay interés real por quedarse con Albacete o, por otro lado, la intención es que Casas y Amador tengan que pujar más fuerte en su oferta, o si es un poco de ambas cosas. La solución, el martes tras finalizar el plazo a las 23:59 horas del 5 de abril.

Y como reflexión final: si en lugar de un pliego tan poco apetecible y sin atractivo como el actual,hubiesen elaborado un documento innovador, la cola de licitantes hubiese llegado desde la plaza de toros hasta la puerta del Consistorio. Pero bueno, otra oportunidad perdida. Por eso de no perder la costumbre, ya saben.