La de los Depósitos del Sol en el barrio Carretas-Huerta de Marzo, sigue siendo una de las bibliotecas más bonitas que uno ha conocido. Convertir el vaso central de ese depósito en un albergue de cultura como éste es una gozada para la vista, situándose a la altura de lugares tan emblemáticos y visitados como la librería Lello de Oporto (Portugal) en la que se inspira la biblioteca de Harry Potter, o la de la Universidad de Oxford (Inglaterra).

Veinte años cumple ese espacio desde que el entonces presidente regional, José Bono la inaugurara tras un largo proceso de rehabilitación. Esas dos décadas ya significan una una efeméride importante que el Ayuntamiento de Albacete va a conmemorar con conferencias, exposiciones, conciertos y otras actividades culturales que se van a repartir por las distintas bibliotecas municipales o las plazas y jardines que las albergan.

Pero este aniversario es aún más importante si lo unimos a los cien años que han transcurrido desde que los arquitectos Julio Carrilero y Juan Muñoz diseñaran en 1921 este edificio como depósito de agua. Resulta curioso, por tanto, que dos de las bibliotecas más importantes y singulares de Albacete provengan del agua. La otra, recientemente inaugurada, no es otra que la de los depósitos de la Fiesta del Árbol, aunque en este último caso, aunque fuera pensado para el abastecimiento de la ciudad, nunca tuvo una gota de tan esencial líquido en su interior, si acaso la de las goteras que con los años se fueron generando.

La primera de las conferencias programadas para este doble aniversario la vaa a ofrecer este jueves a las siete de la tarde Miguel Lucas con el título “Agua y Pandemias”, mientras que el acto central será el jueves 28 de octubre, incluyendo un concierto de la Banda Sinfónica Municipal de Albacete.