Las consecuencias para la salud del consumo de bebidas energéticas son graves. Más en el caso de niños y adolescentes. De ahí el interés de los grupos parlamentarios, a preguntas del Partido Regionalista, de conocer si el Gobierno regional va a prohibir su venta a los menores de edad, como va a hacer Galicia. Es más, son siete las comunidades autónomas las que se plantean regular la venta de bebidas energéticas a menores.

A partir de enero del año que viene los menores que tomen estas bebidas en Galicia se enfrentarán a multas de hasta tres mil euros. La venta y comercialización de estos productos a niños y adolescentes en la comunidad gallega será además una falta muy grave, penalizada con hasta seiscientos mil euros.

La Dra. María Jesús Cabero, jefa del servicio de Pediatría del Hospital Valdecilla, ha contado hoy en Cope Cantabria que "Aunque no hay percepción de riesgo ni por parte de los niños ni por las familias, la cafeína de estas bebidas crea dependencia"

"La labor de concienciación y educación sanitaria es realmente importante", recordaba la doctora. Y aunque depende de las dosis y de la edad del niño, además de si tiene patología previa," Las consecuencias son graves a nivel cardiovascular, a nivel de fomentar otras adicciones y a nivel de que a veces crea una cierta dependencia, así como las alteraciones que todos sabemos como la del sueño, alteración del humor, a una edad en la que ya son importantes estos problemas".

BEBIDAS ENERGÉTICAS Y ALCOHOL, UN CÓCTEL EXPLOSIVO

Esta combinación es sin duda lo que más preocupa a los expertos, porque está demostrado que la combinación de ambos hace que a la larga se consuma más alcohol. La Dra. Cabero confirmaba que "Esto es lo que más nos preocupa porque sí que se está extendiendo, el factor depresivo y de somnolencia que produce el alcohol, lo contrarrestan con el efecto euforizante que tienen las bebidas energéticas y eso hace percibir que no son conscientes de la cantidad de alcohol que toman".