Theta trae a la memoria el paso de la tormenta Delta por Canarias

El acercamiento del ciclón tropical Theta a las islas ha vuelto a traer a la memoria de miles de canarios el paso de otro fenómeno de estas características por nuestra tierra, la tormenta Delta que afectó al archipiélago y a Madeira entre el 28 y el 29 de noviembre de 2005.

Delta inició su andadura en el Golfo de Guinea y, al contrario de lo que suele ocurrir, giró hacia el norte, manteniéndose estática cerca de las Azores, desplazándose posteriormente al este y no al oeste como sucede normalmente.

Este sistema tropical dejó una racha de viento de 248 km por hora en la zona de Izaña, en la cumbre de Tenerife. Se trata del mayor valor registrado hasta ese momento en nuestro país.

Canarias no se había visto afectada nunca por episodios de este tipo, aunque la probabilidad de que se produzcan con más frecuencia ha aumentado en los últimos años.

La tormenta causó una víctima mortal en Fuerteventura y cuantiosos daños materiales en el tendido eléctrico. En la provincia occidental, 300.000 personas se quedaron sin suministro. En Tenerife, la isla más afectada por el temporal, el corte del fluido no se pudo recuperar hasta una semana después.

La fuerza del viento arrasó, además, con zonas de cultivo, especialmente en la comarca del valle de Güímar, con afecciones importantes en la producción de invernaderos y de plátano.

El fuerte oleaje provocó el naufragio de una embarcación que transportaba 38 inmigrantes subsaharianos, seis personas no pudieron ser rescatadas y murieron ahogadas.

En Gran Canaria, Delta también fracturó el Dedo de Dios, uno de los símbolos de la isla. La parte superior de este monumento natural, de veinte metros, se hundió bajo las aguas.

Imágenes: Archivo Agencia EFE