La primera semana de noviembre está desbordando las previsiones del Cabildo de Tenerife para la campaña de recogida de pollos de pardela a causa de la contaminación lumínica, con llamadas telefónicas que rondan entre las 2.500 y 3.000.
La ausencia de luna llena ha provocado que esta semana se está notando un pico en esta problemática, llegando a contabilizarse el martes hasta 210 incidencias de llamadas telefónicas, principalmente, en el sur de la isla.
La consejera de Gestión de Medio Natural y Seguridad del Cabildo, Isabel García, reconoce que el personal del área está teniendo "muchísimo trabajo" y, por eso, pide "paciencia" a quienes se encuentren con alguno de estos pollos. "Es un animal que no necesita una atención inmediata, solo meterlo en una caja aireada y esperar un poco a que le atendamos".
"Estamos registrando una incidencia muy elevada este año", ha apuntado en declaraciones a Mediodía Tenerife. "Tenemos equipos extra y refuerzo de personal, pero aun así contamos con muchísimas llamadas". Ante cualquier caso, García pide llamar a los teléfonos 900 28 22 28 o 922 44 57 77, así como a la Policía Local, Protección Civil o ADAE, entre otros, pero no a una clínica veterinaria.
La consejera señala que están teniendo "unas 180 llamadas diarias como mínimo", lo que supone "un trabajo ingente, porque hay que gestionar cada una y con casuísticas personales distintas". La prioridad, asegura, es atender a las que han resultado heridas.