Estaba sola en la playa cuando se desplomó… y lo que hizo su perra dejó a todos sin palabras
La perra de asistencia alertó a la Policía Local cuando la mujer se desplomó, demostrando cómo el adiestramiento y el vínculo emocional pueden convertirse en un salvavidas

Entrevista a Kevin Ojeda dueño del perro de asistencia
Gran Canaria - Publicado el
2 min lectura8:52 min escucha
La playa de Melenara, en Telde, fue escenario de una historia que demuestra el papel vital de los perros de asistencia. A primera hora de la mañana, la esposa de Kevin, afectada por diabetes, sufrió una fuerte crisis de hipoglucemia que la dejó sin fuerzas y desplomada en la arena.
En ese momento, Ayka, una perra labradora entrenada para detectar bajadas de azúcar, actuó con rapidez: ladró insistentemente, buscó ayuda y alertó a los agentes de la Policía que patrullaban la avenida. Gracias a su reacción, la mujer recibió auxilio inmediato y pudo recuperarse tras ser atendida por los servicios sanitarios.
El olfato que detecta lo invisible
Kevin, adiestrador canino y esposo de la afectada, ha explicado en los micrófonos de Herrera en COPE Gran Canaria que los perros de asistencia son capaces de detectar un compuesto químico llamado isopreno, que se libera en el cuerpo durante una hipoglucemia. “Ayka empieza a ladrar de forma desesperada, no como un ladrido normal, hasta lograr que alguien acuda en ayuda de mi esposa”, señala.
Ayka empieza a ladrar de forma desesperada, no como un ladrido normal, hasta lograr que alguien acuda en ayuda de mi esposa
En este caso, la perra no solo dio la voz de alarma, sino que se mantuvo tranquila una vez que comprobó que la Policía y la ambulancia ya atendían a su dueña.
Un vínculo inseparable

Akira perro guardián
Para la familia, Ayka no es solo un perro de asistencia. “Mi esposa siempre dice que es un ángel de cuatro patas”, confiesa Kevin. El animal la acompaña en todas partes y ha intervenido en otras ocasiones, incluso de noche, despertando a su dueño cuando su mujer sufría una bajada de azúcar mientras dormía.
Lo que comenzó como una mascota familiar se convirtió en una auténtica aliada. Kevin detectó sus aptitudes tranquilidad, sociabilidad y capacidad de protección
y decidió entrenarla específicamente. Ahora, Ayka no solo alerta de crisis de hipoglucemia, también abre puertas, trae objetos y ayuda en tareas cotidianas.
La importancia del adiestramiento
“No todos los perros sirven para ser de asistencia, incluso dentro de la misma raza”, advierte Kevin. La formación es larga y requiere una estricta selección de animales que reúnan las condiciones necesarias. El proceso incluye socialización en espacios públicos, entrenamiento en obediencia y tareas prácticas, hasta que el perro es capaz de actuar de manera autónoma en una emergencia real.
No todos los perros sirven para ser de asistencia, incluso dentro de la misma raza
Tras esta experiencia, la familia no duda de que Ayka se ha convertido en un miembro imprescindible. “Gracias a ella vivimos más tranquilos y mi esposa sabe que siempre tiene a alguien pendiente de su salud”, concluye Kevin.



