El innovador sistema con el que podrás saber fácilmente si un alimento está en buen estado: "Vale menos de 1 euro"

Este invento ha recibido el premio de Jóvenes Investigadores 2025 que organiza la Oficina Europea de Patentes

Lucia Hernández Peraza

Tenerife - Publicado el - Actualizado

3 min lectura

Un joven grancanario ha sido galardonado con el premio Jóvenes Inventores 2025 que organiza la Oficina Europea de Patentes. Se llama Pablo Sosa, es biotecnólogo y junto a sus colegas, Pilar Granado y Luis Chimeno, han diseñado con su empresa Oscillum unas etiquetas inteligentes que informan sobre el estado de los alimentos para evitar su desperdicio. El acto de entrega de este premio se llevó a cabo de Islandia, allí se fueron él y sus compañeros que formaron parte de los 10 ganadores de esta edición, que recibieron un premio de 5.000 euros, gracias a que recibieron un gran número de votos por Internet.

El biotecnólogo nos atendía esta mañana en Herrera en COPE Canarias. Él admitía a nuestros micrófonos que todavía estaba con el subidón del premio, pero que sobre todo agradecía la publicidad para que los consumidores conozcan la existencia de este tipo de productos: "Al fin y al cabo este reconocimiento nos premia a nosotros, a los inventores y a todo el equipo que está detrás desarrollando tecnología como científicos, como jóvenes científicos que han desarrollado algo que tiene una relevancia".

¿En qué consiste?

Pablo compara estas etiquetas a un semáforo, lo pones donde quieras: en carne fresca, en sobras, en productos que llevan tiempo en el congelador... Las etiquetas cambiarán de color, de transparente a negro, e indicarán la calidad y la seguridad. "Pasan de transparente a gris, indicando que un producto ha perdido calidad pero que sigue siendo seguro para su consumo", explica. Eso podría tener mucho rendimiento en la cocina.  "Después de gris a negro, cuando ya la seguridad alimentaria está comprometida, cuando ya el nivel de bacterias es tan alto que supone un riesgo microbiológico". 

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En España, se desperdician aproximadamente 1.364 millones de kilos de alimentos al año 

Este invento supone también una opción para fomentar el mayor aprovechamiento de los alimentos en el hogar.  "Nosotros, nuestra tecnología lo que busca es solventar esos dos problemas, la seguridad alimentaria y el malgasto de alimentos", indica. Según el biotecnólogo, en este mundo desarrollado en el que estamos viviendo, tenemos acceso a los alimentos muy rápido. Mientras nuestros abuelos y abuelas eran capaces de aprovechar la comida, nosotros ante cualquier riesgo de intoxicación preferimos descartar. 

buscan aterrizar en europa

Por el momento, gracias a la Unión Europea y al CDPI, un organismo español de ciencia que les ha ayudado a terminar de financiar el desarrollo de la tecnología a nivel industrial, ya están comercializando en seis países de África y en Latinoamérica, en concreto en Perú. Ya están negociando para aterrizar en Colombia y Chile. En cuanto a Europea, este emprendedor y su equipo necesitan un partner de distribución: " Un supermercado, una cadena de tienditas que las pueda vender al consumidor, porque es un producto tan económico y bueno, que la venta online es muy complicada". 

Es un producto tan económico y tan bueno, que la venta online es muy complicada"

Pablo Sosa

Biotecnólogo y CEO Oscillium

Un pack de 24 etiquetas vale un euro por lo que los gastos de envíos serían muy altos para el consumidor.  "Es mejor para vender este tipo de productos al consumidor, que esté en una tienda pequeña, un local, farmacia, supermercados... Así el consumidor los adquiere a la vez que fomentamos la compra local y los incorpora en su día a día". El biotecnólogo cree que una vez el consumidor le vaya gustado el producto, finalmente podrán incorporarse a grandes marcas.