El inicio de partido, de forma lógica, fue bastante igualado. Tanto el Guaguas como el Haasrode Leuven se tantearon un poco, aunque los amarillos fueron los primeros en dar un golpe sobre la mesa. El cuadro grancanario encontró en el saque y en la defensa en red dos grandes aliados, logrando encarrilar un buen primer parcial sobre el que ir construyendo el set (3-7).

Tras un tiempo muerto, los belgas reaccionaron, pero el Guaguas estaba en un estado de forma realmente dulce. Los insulares se mostraron muy sólidos en su juego y eso los elevó de forma notable para ir encaminando el primer punto. El set fue de color canario prácticamente en su totalidad y los de Sergio Camarero se turnaron el protagonismo para cerrar la manga por un claro tanteo de 16-25 (0-1).

Después de haber perdido el primer set, el Haasrode Leuven hizo un esfuerzo para igualar la contienda. Borja Ruiz mantuvo entonces a un Guaguas más errático por delante, pero el set había cambiado respecto a la primera manga y los belgas ya llamaban a la puerta. La defensa en la red ya no estaba funcionando tan bien como al principio y eso igualaba mucho un partido que había cambiado un poco (10-11).

Ya en pleno tramo decisivo de la manga, ninguno de los dos equipos consiguió hacerse con el dominio real de la situación. El Guaguas lograba escapar un poco y luego, muy rápidamente, perdía esa ventaja pese a que, por ahora, el Haasrode Leuven no se ponía por delante. A pesar de ello, los insulares no fallaron en la recta final (22-25), con un enorme Borja Ruiz, para casi ponerle la puntilla al partido (0-2).

Los pupilos de Sergio Camarero estaban ya rozando la victoria, pero el Haasrode Leuven no había dicho su última palabra. La escuadra belga fue con todo a pesar de que, como durante muchos momentos del choque, no terminaron de ponerse por delante. El Guaguas se mantuvo fuerte y un parcial de 2-6 obligó a Kris Eyckmans a parar este tercer set con un tiempo muerto porque se le escapaba el choque (6-12).

Ese tiempo muerto era prácticamente la última oportunidad de los locales para meterse en el partido y hubo reacción. Sin embargo, los amarillos respondieron con creces para no perder el dominio, manteniendo a ralla al un Haasrode que, pese a su ímpetu, no podía con los grancanarios. La seguridad de los isleños era un gran punto a su favor justo cuando se alcanzó el que podía ser el momento de definición (16-20).

A partir de ahí comenzó un tira y afloja entre ambos en el que el Guaguas iba a salir victorioso porque, como demostró a lo largo del encuentro, fue mejor que su rival. Aun así, el Haasrode Leuven intentó con todo sacar adelante algún set, pero los de Camarero no fallaron y cerraron la última manga por 21-25. El primer paso está dado y ahora solo queda terminar la faena lel próximo miércoles en el Centro Insular de Deportes (0-3).