Las semanas del estado de alarma impuesto por el Gobierno de España han dejado centenares de multas en todo el país por incumplir las normas derivadas de la lucha contra el coronavirus. Algunas han sido muy llamativas. Es el caso de la que le ha 'caído' a Constante González, vecino de Areñes (en el concejo asturiano de Piloña) y excartero del pueblo.

Constante tiene 97 años y ha tenido que abonar una sanción de 300 euros (por acogerse al plazo de pago con descuento porque la multa que le llegó a casa era de 600 euros) por ir a tirar la basura. Ha contado su historia en el Diario El Comercio. "Tuve mala suerte", asegura este hombre, que fue 'cazado' por la Guardia Civil cuando volvía a su casa tras depositar las bolsas en los contenedores (de reciclaje, por cierto). Él ha explicado que están muy cerca de su casa, pero que cuando regresa, lo hace dando un rodeo porque "el camino es más llano".

El expediente sancionador, sin embargo, recoge que Constante hacía era "simplemente caminar", a pesar de que él intentó explicar a los agentes de la Benemérita su situación. Este hombre, que fue 'Paisano de Piloña' en 2018, padece sordera y al parecer, no llevaba los audífonos aquel día. Ocurrió en la mañana del 21 de marzo.

Según ha contado en El Comercio, ya ha pagado la multa, a pesar del "agobio y el disgusto" que se llevó tras el incidente. La mejor noticia es que ha perdido 300 euros, pero mantiene su salud intacta cuando parece que lo peor de la pandemia del coronavirus ha pasado en Asturias y la comunidad autónoma afronta las últimas semanas de la desescalada.