Laura Farré Rozada, la pianista y matemática que desmonta en Gijón el mito de la separación entre ciencias y letras: "Siempre han ido de la mano"

La pianista y doctora en Matemáticas Laura Farré Rozada ha visitado Gijón para desmontar uno de los mitos más extendidos en nuestra sociedad: la supuesta división entre ciencias y letras. En una entrevista en Mediodía COPE Gijón, por una conferencia-recital en el Centro Municipal Integrado de Pumarín-Gijón Sur, Farré ha demostrado que música y matemáticas “siempre han ido de la mano”, a pesar de la visión actual que las considera disciplinas opuestas.

Un vínculo histórico

Este vínculo no es un invento moderno. Según explica Farré, “en la antigua Grecia y después, en la Edad Media, se utilizaba la música para ejemplificar problemas de astronomía, de geometría y aritmética”. Este conjunto de saberes era conocido como el quadrivium y evidencia la unión fundamental entre ambas áreas del conocimiento.

A lo largo de la historia, los compositores han utilizado las matemáticas como un divertimento para plantearse retos creativos en sus obras. Farré destaca que, “cada vez que se desarrollaba un nuevo campo en el ámbito de las matemáticas, los compositores siempre encontraban la forma de incorporarlo a sus composiciones”.

De hecho, la música ha llegado a anticipar conceptos que los matemáticos tardarían tiempo en formular, como es el caso de los fractales.

La teoría del caos es uno de aquellos conceptos que anticiparon antes los músicos que los matemáticos"

Laura Farré Rozada

Pianista y doctora en Música y Matemáticas

La 'separación' del siglo XIX

La idea de que música y cálculo son incompatibles es relativamente reciente. Farré sitúa el origen de esta división en el siglo XIX, cuando “la música se emancipó como arte, y entonces todavía tenemos esta visión de que música y matemáticas no tienen nada en común”. 

En ese momento, con el auge de los solistas de música clásica que tocaban de memoria, “se crea todo este imaginario del genio musical” y lo racional queda en un segundo plano.

Sin embargo, esta tendencia se revirtió en el siglo XX. La pianista explica que, tras la Segunda Guerra Mundial, los compositores buscaron “desarrollar un nuevo lenguaje que pueda ser más acorde con el contexto histórico”. Este nuevo lenguaje volvió a tender puentes con las matemáticas para describir una sociedad que había cambiado drásticamente.

En el siglo XIX, la música se emancipó como arte, y desde entonces, tenemos esta visión de que música y matemáticas no tienen nada en común"

Laura Farré Rozada

Pianista y doctora en Música y Matemáticas

Del caos a la música en Gijón

En la conferencia-recital de Gijón, titulada 'Caos: de la teoría a la música', Farré ha utilizado la teoría del caos como ejemplo para demostrar que las matemáticas están en la música, incluso de forma no intencionada, pues como ella misma afirma, “la teoría del caos es uno de aquellos conceptos que anticiparon antes los músicos que los matemáticos”.

El formato del evento, enmarcado en el ciclo Gijón ConCiencia de la Fundación Municipal de Cultura, ha combinado la divulgación con la interpretación, con la explicación de conceptos de la teoría del caos y su relación con parámetros musicales; y la interpretación de algunos ejemplos en el piano, con el objetivo de hacer la experiencia más interactiva.

Además de su labor divulgadora, Laura Farré Rozada ha publicado recientemente su tercer disco, titulado Araspel. Se trata de un proyecto personal en el que da a conocer la música de Armenia, fruto de diez años de investigación para documentar el repertorio pianístico de este país, "en gran parte desconocido".