Vuelve a ponerse el uniforme de Policía tras superar un tumor cerebral y así se lo agradece a sus médicos
Se llama Sergio Ruiz, ha desarrollado la mayor parte de su carrera como guía canino en Zaragoza y hace un año le diagnosticaron un tumor en la cabeza

Así agradeció Sergio el trato recibido en el Hospital Miguel Servet de Zaragoza.
Zaragoza - Publicado el - Actualizado
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Nunca perdió la esperanza de superar una situación así. Sabía que estaba en buenas manos. Cuando le diagnosticaron hace un año un tumor cerebral, se vino abajo. Se llama Sergio Ruiz, está destinado en Zaragoza y tras un largo y difícil camino, ha conseguido superar la enfermedad y volver a ponerse el uniforme con una sonrisa.
Han sido meses muy duros en los que ha estado perfectamente atendido por los profesionales del Hospital Universitario Miguel Servet de Zaragoza. Por eso, una vez recuperado, ha querido agradecer a todos ellos, su trabajo. Un trabajo que le salvó la vida el año pasado y le ha permitido regresar a su profesión de Policía Nacional. Está destinado en Zaragoza y la mayor parte de su carrera la ha desarrollado como Guía Canino.

Sergio repartió flores entre el personal que le atendió como muestra de agradecimiento.
No tiene palabras para agradecer a la Sanidad Pública y a los profesionales que le atendieron en Zaragoza, lo que hicieron por él y cómo le ayudaron a recuperarse. Un equipo de médicos, auxiliares, enfermeras, logopedas, fisioterapeutas... que lo acompañaron en todo momento durante su recuperación. Personas que no solo curan con sus manos, sino también con su trato, su entrega y su humanidad.
"Gracias a vosotros, que sepáis que vuelvo a vestir mi uniforme. Os estoy muy agradecido"
Policía Nacional
Para dar las gracias a todos los profesionales que le atendieron, se ha acercado hasta el Hospital Miguel Servet con un ramo de flores blancas para darles una a cada miembro del equipo. “Me diagnosticaron un tumor en la cabeza y tengo que decir que gracias a los profesionales, a los médicos, a las auxiliares, a las enfermeras del hospital, puedo ponerme de nuevo el uniforme y disfrutar de mi trabajo”.

Sergio repartió flores entre el personal que le atendió como muestra de agradecimiento.
Hace un año “llevaba la cabeza vendada, estaba lleno de cables por todas partes. Gracias a vosotros, que sepáis que vuelvo a vestir mi uniforme, a disfrutar de mi trabajo”. Así se ha dirigido al personal que le atendió y a los que ha regalado una pequeña flor como muestra de agradecimiento: “Os estoy muy agradecido”.